Están interesadas en la concesión del Túnel do Marao, valorado en 370 millonesMadrid. Vila Real es una pequeña localidad portuguesa de la sierra de Marao, famosa porque allí se elabora el vino rosado Mateus. Un paradisíaco rincón que, sin embargo, lleva años esperando el arranque del Túnel de Marao, una concesión que permitirá acelerar y facilitar el acceso a esta localidad y su conexión con la vecina Marao.La espera parece que ha terminado y, el pasado febrero, el Gobierno de Portugal abrió un concurso internacional para diseñar construir, financiar y gestionar la futura autopista y su correspondiente túnel.Un contrato valorado en 370 millones de euros que ha despertado el interés de Cintra, Somague (filial de Sacyr) y ACS. Además, según fuentes cercanas al proceso, las lusas Brisa y Motta Engil (socio estratégico de ACS en puertos) y la francés Eiffage (participada por Sacyr en un 32 por ciento) también están interesadas en hacerse con esta concesión.Primera piedraLa sociedad pública Estradas de Portugal es quien ha sacado a concurso el futuro túnel de Marao, que tendrá una longitud de 30 kilómetros e incluirá la mejora de una infraestructura ya existente.Pero este contrato puede ser sólo la primera piedra del catálogo de concesiones que tiene en cartera, pendientes de sacar a concurso, el Gobierno luso.Antes de terminar el año, el Ejecutivo portugués prevé poner la pugna por la autopista Transmontana, entre Amarante y Bragança, cuya inversión rondará los 300 millones de euros.Los planes de infraestructuras del país vecino contemplan la construcción de 2.600 nuevos kilómetros de carreteras hasta 2010. Con estas nuevas concesiones, las autoridades lusas sumarán 400 kilómetros, lo que significa que todavía está por repartirse casi toda la tarta de concesiones de autopistas de Portugal y, por tanto, las compañías españolas tienen un amplio abanico donde elegir.Sobre todo, teniendo en cuenta la potencia compradora que están demostrado en otros puntos del planeta, como Estados Unidos. Un ejemplo de su actual hegemonía en este país es concurso por la autopista North Tarrant Express, en Texas, valorada en 2.000 millones de dólares (1.500 millones de euros). El pasado jueves se cerró el plazo para presentar ofertas para la precalificación. Acudieron siete grupo, seis españoles: Ferrovial, ACS, Sacyr Vallehermoso, FCC, Acciona y OHL. El séptimo, y único no español, es la portuguesa Brisa. Sólo cuatro pasarán a la siguiente fase.