Altadis, Japan Tobacco y BAT estudian seguir a Philip Morris y subir el precio de sus cajetillasMADRID. El recién estrenado año empieza con el sonido de los tambores de guerra en el negocio del tabaco en España. Una vez confirmada la subida de 15 céntimos puesta en marcha por Philip Morris para sus principales marcas, Marlboro, L&M, Chesterfiel y Next, el resto de sus competidores meditan también una subida para hacer frente al fuerte incremento de los impuestos especiales aprobado por el Gobierno. Desde el sector no se descarta que grupos como Altadis, BAT, o Japan Tobacco, entre otras, sigan la estela de su rival norteamericano en los próximos días, aunque también avisan de que puede ser el origen de una nueva guerra de precios, lo que podría obligar a Philip Morris a dar marcha atrás. Después de que en 2006 se aprobara la aplicación de un impuesto que fija el precio mínimo de venta en 2,20 euros, (para evitar que las marcas baratas fueran excesivamente accesibles) las principales tabaqueras del sector se embarcaron en una lucha de precios exprimiendo al máximo sus márgenes. Debido a esta imposición, a la que habría que añadir el IVA ya existente, un impuesto específico y otro que se calcula sobre el precio de venta, grandes grupos tabaqueros tuvieron que adaptar su oferta. Una nuevo incremento aplicado en junio del año pasado obligó una vez más a las tabaqueras a subir el precio de sus cajetillas por encima de lo previsto incluso por el Gobierno, lo que recortó más aún sus márgenes. Ahora, con la subida del IVA del tabaco del 16 por ciento al 18 por ciento prevista para julio de este año tendrán que volver a rediseñar la estrategia.