La entidad financiera que en la actualidad cuenta ya con un 4,9 por ciento, ofrece 13.350 millones por el restonueva york. Pese a que sobre la nipona Nikko Cordial se cierne un verdadero nubarrón de escándalos, con falsificación de documentos incluido, Citigroup sigue empeñado en hacerse con la entidad inversora, con sede en Japón, a toda costa. Por eso después de la disconformidad de algunos inversores, el banco estadounidense hacía ayer oficial el endulzamiento de su propuesta que finalmente alcanza los 13.350 millones de dólares. Mediante esta operación, Citigroup, que en la actualidad cuenta con un 4,9 por ciento de Nikko, pretende hacerse con el resto de acciones disponibles en un plazo que impone como fecha límite el 26 de abril del presente año. De consumarse, esta sería la mayor compra por parte de una compañía extranjera de una entidad financiera nipona y afianzaría la presencia del banco norteamericano en el segundo mercado económico más grande del mundo. De modo que Citigroup podría ganar una importante presencia en sectores como el de la venta de fondos mutuos y otros servicios financieros. Dos ofertas hasta ahora Cabe recordar que pese a la multa de 4,26 millones de dólares que Nikko ha tenido que pagar por su falsificación de documentos financieros, la entidad es la tercera compañía de servicios de inversión más grande en el país del sol naciente. Citigroup también presentó esta oferta ante la Tokio Stock Exchange que, de momento, ha decidido no expulsar a Nikko del índice pese a sus enredos financieros. Según dejaba claro Douglas Peterson, director de Citigroup en Japón, el banco no tiene ninguna intención de aumentar la presente oferta, que no dudó en calificar como "honesta y firme". Finalmente, los consejos de administración acordaron aumentar el precio de cada acción de Nikko un 26 por ciento. De este modo, el banco estadounidense acordará pagar 14.49 dólares por cada participación en la firma japonesa. Todo esto después de que su primera oferta de que cada acción tuviera un valor de 11.51 dólares fuese rechazada por algunos de los más importantes inversores de Nikko.