Facilitarán un crédito de alrededor de 10.000 millones para la entrada en Endesamadrid. Deutsche Bank y Banca Intesa están preparando un crédito sindicado de alrededor de 10.000 millones de euros para financiar la operación de compra que ha llevado a cabo Enel sobre el 24,97 por ciento del capital de Endesa.Según informaron fuentes financieras, ambas entidades ultiman la ampliación de la deuda de la italiana, que se había reducido considerablemente tras la venta de activos, como sus teleco Wind.Deutsche Bank controla cerca del 5 por ciento del capital de Endesa y de hecho llegó a superar esta participación el pasado mes de agosto. La entidad financiera alemana es uno de los asesores de la eléctrica española.Enel formalizó ayer una "Share Swap Transaction" con Mediobanca cuyo subyacente es un máximo de 31,5 millones de acciones de Endesa. La modalidad de liquidación es por diferencias con opción para Enel Energy Europe de requerir Ia liquidación por entrega condicionada entre otros requisitos a la obtención por Enel de las pertinentes autorizaciones administrativas para efectuar la compra. Enel Energy Europe ya ha contratado coberturas financieras por las 31.500.000 acciones de Endesa, a un precio medio de 39 euros por acción, valorado en total en 1.228,5 millones de euros.Con esta compra, Enel prácticamente alcanza el máximo de participación y se consolida como el primer accionista de Endesa.Por otro lado, el ministro de Industria, Joan Clos, evitó ayer comentar la posibilidad de que Endesa quede repartida a partes proporcionales entre manos españolas, italianas y alemanas y argumentó que "no hace falta que especulemos sobre esto porque no hay ninguna decisión tomada en este sentido" y dependerá de los accionistas. El ministro consideró que "no queremos añadir desde el Gobierno ninguna hipótesis de este orden" ni "ningún elemento distorsionador en el proceso" de la opa de Endesa. "Hay una opa que está en proceso y sus accionistas decidirán lo que deban decidir, más allá de eso, desde el Gobierno mantenemos una política de regulación que garantice calidad de servicio y suministro", concluyó. Intereses de Italia El primer ministro italiano, Romano Prodi, admitió que "siempre" observa "los intereses del país" a la hora de tratar "problemas industriales", en referencia a las operaciones abiertas entre compañías italianas y extranjeras, y en particular, españolas, como es el caso de Abertis-Autostrade, Endesa-Enel y Telefonica-Telecom, informa Efe.