El presidente de la Caixa disculpó el martes su ausencia de ayer en el consejomadrid. Cuatro de la tarde. Paseo de la Castellana, 278. Los consejeros de Repsol YPF, a excepción del presidente de la Caixa, Isidre Fainé, se disponen a comenzar una de las reuniones más tensas de los últimos años para la primera petrolera española. Sacyr y Repsol afrontan su Día D particular. Tras casi un mes de acusaciones cruzadas en la prensa, Antonio Brufau, presidente de la petrolera, y Luis del Rivero, presidente de Sacyr, aprovecharon para echarse en cara las indiscreciones públicas de las últimas semanas durante las casi seis horas que duró el consejo. La Caixa, con la ausencia destacada de su presidente, intentó que ambas partes lograsen alcanzar un acuerdo y evitar así un enfrentamiento mayor al tiempo que se libraba de involucrarse en la batalla con la representación del director general, Juan María Nin. El martes, Isidre Fainé había disculpado su ausencia en una reunión con el presidente de Repsol en la que le volvió a reiterar su apoyo. Un compromiso anterior en el Bank of East Asia, en Hong Kong, del que Criteria tiene una participación de casi el 10 por ciento, no le permitía acudir a la reunión que ha tenido en vilo a la petrolera española durante todo el último mes. El consejo de Repsol YPF se prolongó y las posiciones se mantuverion enfrentadas. Sacyr sigue reclamando desinversiones a Brufau, que mantiene su defensa de una rebaja del dividendo para poder seguir apostando por el crecimiento de la compañía. El presidente de la petrolera sabe que cuenta con el respaldo de la Caixa, así se lo aseguró en la reunión, adelantada por elEconomista, entre el presidente de la compañía y el de la entidad financiera. No obstante, los miembros del consejo deciden votar la rebaja por primera vez, y la reducción del dividendo se adopta por unanimidad. El resultado finalmente es apabullante y Brufau se alza con una importante victoria. Sacyr y Criteria acatan la propuesta de Repsol de recortar el dividendo. La constructora ya lo había anunciado: no iba a emprender una batalla por 40 millones de euros arriba o abajo. De este modo, el consejo de Repsol reduce su dividendo a cuenta un 19 por ciento, hasta los 0,425 euros por acción, tal y como adelantó elEconomista hace dos semanas, lo que supondría un dividendo final de 0,85 euros si al ordinario, como es habitual en la petrolera, se le destina la misma cantidad. Sacyr había propuesto en su momento que se mantuviera el dividendo del año anterior en los 1,05 euros por acción, pero esto hubiera supuesto un pay out cercano al 90 por ciento muy arriesgado para los planes de crecimiento de la empresa. La petrolera ha decidido adelantar también el pago de dicha cantidad al 22 de diciembre, lo que supone que el medio millón de accionistas minoritarios que tiene la petrolera podrá beneficiarse de una menor carga tributaria, ya que la subida de impuestos aprobada por el Gobierno todavía no está en vigor. Este dividendo de 519 millones de euros hace compatible el crecimiento de la compañía con una política adecuada de retribución al accionista. Según explicó la petrolera, en un entorno caracterizado por el descenso de precios y beneficios en el sector, el dividendo a cuenta representa el 81 por ciento del correspondiente al año anterior. A lo largo de las últimas semanas, Sacyr y Repsol han mantenido un tenso enfrentamiento a costa de la gestión de la petrolera. Por un lado, la constructora, apoyándose en uno de los consejeros independientes a propuesta de la compañía de Del Rivero, Luis Carlos Croissier, solicitaron la desinversión de activos, pero la gestión de la compañía se ha negado amparándose en los planes de futuro de la empresa. Los gestores de la petrolera se plantean desinversiones pero siempre en activos no estratégicos, así como la posible búsqueda de un socio para llevar a buen puerta la millonaria inversión que se requiere en Brasil y que asciende a más de 10.000 millones de euros. Cepsa mantiene la retribución Cepsa anunció ayer que mantendría el pago del dividendo en 0,40 euros por cada título, es decir, que Total se podrá embolsar la misma retribución e Ipic la aumentará con su mayor participación.