La petrolera aprobará el recorte del dividendo, pero se debatirán los problemas de gestiónBrufau mantiene abierta la posibilidad de incorporar a un accionista chino a YPFmadrid. La disputa entre Repsol YPF y Sacyr tendrá mañana su primera gran batalla, pero el final de la guerra no se producirá probablemente hasta dentro de unos meses, siempre que el Ministerio de Industria o La Caixa no logren imponer un acuerdo entre las partes enfrentadas. El presidente de la constructora, Luis del Rivero, se sentará frente a frente con Antonio Brufau después de tres semanas de tira y afloja por el dividendo de la petrolera y las críticas a la gestión del directivo de Mollerusa. Sacyr está dispuesta a levantar el pie del acelerador en este primer choque para no perder la guerra: tener un mayor peso en la gestión de la petrolera. La constructora quiere demostrar que su pelea no surge por los 40 millones de euros de diferencia entre la cantidad de dividendo propuesta por la petrolera o la que solicitaron ellos en la reunión del consejo del pasado 28 de octubre. Así se lo habría manifestado, al menos, el propio Del Rivero al presidente de La Caixa, Isidro Fainé, en una reunión mantenida la pasada semana en Madrid. Luis del Rivero tiene claro que con el 20 por ciento del capital de Repsol tiene derecho a formar parte de las decisiones de la compañía en materia de estrategia y así quiere hacerlo constar. La petrolera aprobará el miércoles un recorte del dividendo hasta los 0,85 euros, lo que supone el pago de un dividendo a cuenta en diciembre de 0,425 euros por acción, tal y como adelantó elEconomista. Brufau cuenta con el respaldo de La Caixa para recortar la retribución del accionista, pero la entidad financiera está dispuesta a que se realicen desinversiones de activos que no sean estratégicos para la empresa, ya que consideran que se puede sacar mayor partido. La Caixa, al mismo tiempo, sigue manteniendo su intención de desprenderse de la participación de Repsol, aunque no tiene prisa por hacerlo. Por este motivo, la entidad financiera sigue muy interesada en que el valor de los títulos de la petrolera se mantenga alto y no arriesgarse a una huida de los fondos de inversión que pudieran reducir el valor de la empresa. Más peso financiero Criteria, el holding de participaciones de La Caixa, quiere seguir reforzándose en el área financiera e ir rebajando sus participaciones industriales. Prueba de ello ha sido la venta de parte de Aguas de Barcelona a Suez para reforzarse en el Erste Bank y hacer crecer Segurcaixa con la incorporación de Adeslas. La Asociación de accionistas minoritarios (Aemec) se pronuciará también hoy sobre la disputa interna entre el primer accionista de la petrolera y el gestor. Antonio Brufau fue ratificado como consejero de la petrolera en la junta del 9 de mayo de 2007 por un período de cuatro años, por lo que en este ejercicio no correspondería renovarle su mandato de consejero. No obstante, Sacyr puede dejar para ese momento su asalto a la petrolera. Sacyr tiene que hacer frente en 2011 al pago del principal de su deuda, y la banca extranjera, antes de refinanciar, está pidiendo que se le abonen al menos los intereses generados. En principio, Sacyr no tendrá problemas para refinanciarlo, tal y como ha asegurado el banco de inversión UBS. Venta de YPF Uno de los principales escollos entre la gestión de la petrolera y los primeros accionistas es la desinversión en YPF, que consideran que ya debería haberse realizado. Por el momento, la petrolera, con la colaboración de Goldman Sachs y un bufete de abogados de Estados Unidos, está analizando la posibilidad de realizar una colocación en bolsa del 25 por ciento del capital en los mercados de Estados Unidos, Argentina y Brasil. La petrolera sigue estudiando también la opción del desembarco de una compañía china en el capital, pero para lograrlo requerirá el permiso del Gobierno argentino, que sigue manteniendo una acción de oro en la petrolera. La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, tiene en su agenda un próximo viaje a China en el que se podría analizar este posible desembarco. No obstante, Brufau siempre se ha decantado por la colocación en el mercado minorista para acercar la compañía a los pequeños inversores. La petrolera considera que si los ahorradores argentinos están en el capital, el Gobierno del país siempre tendrá un mayor interés por las decisiones que adopta que puedan afectar a la compañía y puso como prueba de la mejora el desembarco del Grupo Petersen en YPF.