Quiere recolocar en la de Aranjuez a 250 de sus 417 empleadosmadrid. Ya había dado un toque de atención Wolfgang Chur, miembro del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH, cuando en abril del año pasado advirtió que su compañía no descartaba cerrar alguna de sus 18 plantas en España, aunque entonces aseguraba que no había nada concreto.Casi diez meses después ya sabe cómo va a hacer más competitivas sus operaciones en España, y es a través de la reestructruración de su división Gasoline Systems como piensa hacerlo, según informaron fuentes de la compañía. Por eso, en el año 2009 tiene previsto cerrar la fábrica que tiene en Alcalá de Henares, en la que 417 personas que fabrican válvulas de inyección y filtros de combustible. La idea es trasladar gradualmente esa producción a otra planta que Bosch tiene en Aranjuez, en la que recolocaría a 250 personas de la de Alcalá. La compañía espera iniciar en breve las negociaciones con los representantes de los trabajadores, aunque ya advierte que de éstas dependerá que se den las circunstancias favorables para que el traslado mejore la competitividad.