madrid. Vivendi no plantará batalla a Telefónica en la puja por el operador brasileño GVT, por lo que el camino del grupo español para crecer en el sur de Brasil parece expedito. Los problemas de competencia no parecen tales y la aprobación por parte de la Junta de GVT se presume inicialmente factible. Los analistas consultados por la agencia Reuters apuntan que el grupo francés podría tirar la toalla en sus intentos por adquirir a la compañía brasileña, después de ser obstaculizada por una contraoferta de 2.550 millones de Telefónica. Vivendi se ha retirado de acuerdos en el pasado por no querer pagar de más y la expansión en Brasil no es crucial para el mayor grupo de entretenimientos de Europa, añaden. "Dudamos que Vivendi se involucrará en una guerra de ofertas", dijeron los analistas de Bernstein Research. Además, expresaron que Brasil no es un país estratégico para ellos. La oferta de Telesp, filial brasileña de Telefónica, llegó días antes del plazo del 16 de octubre para completar los trámites de la oferta amistosa de Vivendi. Seguirán los mismos gestores Telefónica invitará a los actuales directivos de la brasileña a seguir en la compañía si su oferta triunfa. El director de relaciones con inversores de Telefónica en Brasil, Gilmar Camurra, señaló que espera que los accionistas de GTV se reúnan lo antes posible para votar el levantamiento de la cláusula de píldora venenosa que permite concretar el acuerdo. En términos financieros, se considera una píldora venenosa aquellas maniobras encaminadas a impedir una opa hostil.