Entregará hoy una carta a Durao Barroso para que actúeMadrid. El tiempo sigue su curso y con él la posibilidad de que el Gobierno español dé una solución que no guste a la industria tecnológica al conflicto del canon digital (el pago a sociedades de autores de una cantidad incluida en el precio de cualquier dispositivo que pueda grabar o reproducir contenidos sujetos a la Ley de Propiedad Intelectual). La imposibilidad de alcanzar un acuerdo entre gestoras y fabricantes, que se hizo patente el pasado mes de diciembre, forzó el comienzo de un nuevo plazo: tres meses para que el Gobierno tome una decisión. Pero las posturas son las mismas. Ahora el Ministerio de Cultura defiende los intereses de las gestoras y se sienta frente al de Industria, que defiende el de las tecnológicas. La patronal del sector en España, Aetic, presidida por Jesús Banegas, ha decidido irse hoy a Bruselas para entregar una carta al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, en la que se le pide que se replantee la decisión de aplazar sine die la reforma programada sobre el sistema de compensación equitativa por copia privada (canon) en la Unión Europea.Con esta iniciativa, Aetic se une a las asociaciones europeas de la industria tecnológica y de telecomunicaciones, los productores de cine y los fabricantes de software, cuya firma figura en la carta que se entregará hoy a Durao Barroso. En la misma se pide que se ponga en marcha un sistema transparente y eficiente de establecimiento, cobro y redistribución del canon en la Unión Europea.Aetic recuerda que el pasado 14 de noviembre, el propio Durao Barroso informó al Parlamento Europeo de las intenciones de la Comisión de completar para finales de 2006 la legislación al respecto, tras el resultado obtenido en una encuesta dirigida desde Bruselas en la que se señalaba la "urgente necesidad de modificar la situación en la materia".Banegas considera que "Europa hace mucho tiempo que dejó de ser el centro del mundo. Las empresas europeas tienen que competir con las de otras regiones sin más protección que su excelencia tecnológica. Los consumidores europeos, por otra parte, no tienen por qué sufragar indiscriminadamente a las asociaciones que recaudan derechos de autor".Desde un iPod a un CD pasando por los teléfonos móviles, nada escapará del pago del canon. Por Bruselas ya han pasado también los autores. Varios artistas españoles, entre ellos Victor Manuel y Paloma San Basilio, han apoyado la campaña de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) para impedir que la Comisión Europea elimine el canon que actualmente se paga en 11 de los 25 Estados miembros por las copias privadas. El Tribunal Supremo también recurrió a la justicia europea para que dirima el conflicto del pago del canon por parte de los hoteles.