Han sido elegidos para negociar en exclusiva la construcción y gestión de la futura vía rápidamadrid. La columna vertebral de las autopistas griegas puede ser española. Sólo faltan los últimos flecos para que la futura Central Greece E-65, que unirá el sureste con el noreste del país, pase a manos de Cintra y ACS. El consorcio formado por estas dos compañías, en alianza con la helena GEK, ha sido seleccionado para negociar en exclusiva la construcción, financiación y gestión de la futura vía rápida. Un contrato valorado en 1.500 millones de euros, cuyo plazo de concesión se extenderá durante 30 años.Se trata de la segunda autopista que se adjudica este fructífero consorcio. El pasado mes de junio, ya ganaron Ionian Roads, cuya inversión superará los 1.000 millones de euros y permitirá a Cintra y ACS gestionar la autopista durante otras tres décadas.Además, han presentado una oferta por la autopista CSB, que enlazará Corinthos con Tsakona; y están precalificadas en Urban Roads, en Attica, cuya adjudicación definitiva será a lo largo de 2007. Estos dos proyectos superan los 3.000 millones de inversión.Cintra mandaAunque Cintra, ACS y GEK se reparten por igual la participación en el consorcio, quien llevará las riendas de Central Greece será la filial de Ferrovial, que se ha reservado el derecho a nombrar al director general de la concesionaria.La futura autopista sumará 231 kilómetros. De éstos, 174 kilómetros serán construidos y gestionados por las empresas privadas; mientras que los otros 57 kilómetros serán levantados por el Estado griego y, posteriormente, transferidos a la concesionaria.El plazo máximo para construir la autopista es de 66 meses. No obstante, a finales de 2009 se pondrá en servicio uno de los tramos que será levantado por la Administración. Para arrancar el tramo privado, primero deberán recibir todas las bendiciones del Gobierno, ser ratificadas por el Parlamento griego y tener el visto bueno de Bruselas, que subvenciona el proyecto.