nueva york. En un nuevo intento por sacar a flote la compañía, Gap ha decidido reemplazar a Cynthia Harryss al frente de su mercado más importante, el estadounidense. La presidenta presentó su dimisión el pasado jueves y será sustituida en el cargo por otra veterana de la empresa, Marka Hansen, que hasta la fecha supervisaba la buena marcha de Banana Republic, otra de las marcas que engloba este alicaído imperio textil. Harryss, que tan sólo llevaba dos años en el puesto, se une así a las cabezas de cartel que Gap ha decidido cortar en un intento desesperado por recuperar el brillo de su marca. Hace tan sólo unas semanas, Paul Pressler, ex consejero delegado de la compañía, también tuvo que ceder a las presiones y abandonar su cargo. Para los analistas, este supone un movimiento muy positivo dentro de la empresa, que podría comenzar a reflejar cambios este mismo año, además, una especialista del sector del Bank of America no dudaba en afirmar que "es un impulso moral dentro del propio Gap". Además, la compañía todavía sigue a la busca y captura de un nuevo consejero delegado.