La gasista recibirá 330 millones por la mitad de los clientes que tiene que dejarmadrid. Gas Natural sigue adelante con las desinversiones ordenadas por la Comisión Nacional de Competencia tras la compra de Unión Fenosa. La gasista, que preside Salvador Gabarró, cerró ayer la venta de la mitad de los puntos de suministro que le pedía esta institución. De este modo, Naturgas -la filial de la portuguesa EDP- se quedará con la red de distribución y comercialización de gas en Murcia y Cantabria, por 330 millones de euros, lo que le otorga alrededor de un 4 por ciento adicional de la cuota de mercado de gas de toda España y pasa a ostentar un 14 por ciento. El acuerdo de compraventa incluye las ramas de actividad de distribución de gas que se desarrollan a través de Gas Natural Murcia y Gas Natural Cantabria, y también las redes de distribución de gas natural de alta presión, de la que es titular la compañía en Cantabria, el País Vasco y el Principado de Asturias, las principales zonas de influencia de esta empresa lusa. Los activos de distribución objeto del acuerdo son: redes de distribución en baja presión en Cantabria y Murcia, que cuentan con 2.394 kilómetros de redes y 248.000 puntos de suministro, que suponen 3.500 GWh anuales de gas distribuido. Y redes de distribución en alta presión en el País Vasco, Asturias y Cantabria, con un total de 465 kilómetros de redes, que vehiculan 7.500 GWh anuales de gas. Asimismo, Gas Natural vende las ramas de actividad de suministro de gas a clientes doméstico-comerciales y pymes (incluido el suministro de último recurso) en Murcia y en Cantabria y la cartera de 67.000 contratos de prestación de servicios de mantenimiento, reparación de instalaciones de gas natural y electricidad, servicios de carácter integral y comercialización eléctrica. Finalmente, y en virtud del acuerdo firmado, la gasista venderá a Naturgas la rama de actividad de prestación de servicios comunes en el ámbito territorial asociados a los puntos de suministro y la cartera de contratos incluidos en el acuerdo de compraventa. Esta operación, que se realiza en el marco del plan de actuaciones aprobado por la Comisión Nacional de Competencia (CNC), en relación con el proceso de compra de Unión Fenosa, ha contado con el asesoramiento financiero de Citi y JPMorgan. Por parte de la compradora, el asesoramiento lo ha realizado Banco Espíritu Santo Investment. El acuerdo está sujeto a la aprobación por parte de la Comisión Nacional de Competencia y de la Comisión Nacional de Energía, que exigían un comprador de reconocido prestigio y con conocimiento de la labor a realizar. Esta venta no se espera que tenga ningún problema, ya que Naturgas es la segunda gasista en España por cuota de mercado y, por lo tanto, su solvencia operativa es de sobra reconocida por el sector. El importe de la venta de los activos asciende a 330 millones de euros, lo que implica un múltiplo de 13,2 veces ebitda 2008 y una plusvalía bruta de 50,4 millones de euros, es decir, un buen precio para la operación, que los analistas valoraban en 300 millones para toda la cartera a vender. ¿Quién es el comprador? Naturgas Energía obtuvo en 2008 un total de 131 millones de euros de beneficios y 190 millones de ebitda, pese a la desaceleración económica, tal y como se encarga de recordar el director general de la compañía, Fernando Bergasa, en la memoria anual de la empresa. Esta operación supone para Naturgas aumentar su número de clientes de forma considerable. Concretamente, en el mercado regulado de gas, la filial de la portuguesa EDP tiene 690.032 puntos de suministro. Naturgas cerró durante 2008 la adquisición de Gas Mérida y la compra del 30 por ciento de Septentrional de Gas a Corporación Llorente y comenzó a suministrar gas en cinco nuevos municipios: Dima y Artea en Vizcaya, Ataun y Berastegui en Guipúzcoa y Ágreda en Soria. La compradora es líder en gas en el País Vasco y Asturias, y el segundo operador de electricidad de Euskadi. Con una cifra de negocio de 1.333 millones de euros en 2008 cuenta con una red de gasoductos de más de 5.800 kilómetros, y está integrado en HC Energía-del Grupo EDP- que controla el 65 por ciento del capital junto con el Ente Vasco de la Energía (EVE).