La CECA cree que si las tarjetas son gratuitas, el coste se repercutirá a otros productos madrid. La supresión de las comisiones no es una moda pasajera ni excepcional. Con el tiempo, todos los bancos y las cajas extenderán la gratuidad en ciertos servicios a sus mejores clientes porque es la fórmula más "inteligente" ante la fuerte competencia. Quien así opina es el presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramón Quintás, en una entrevista concedida a Efe. Aquellos que sean clientes de una entidad, "para lo bueno y para lo malo", -sostiene- se beneficiarán de la eliminación de algunas comisiones, mientras que los que eligen una diferente para cada producto recibirán "el trato correspondiente". La reflexión de Quintás llega días después de que el Santander diese una vuelta de tuerca a la comisión cero y la extendiese a universitarios, accionistas.., e inmigrantes, a los que tampoco les cobrará por el envío de remesas.Pero el grupo cántabro no fue el primero en iniciar esta vía, sino el holandés ING Direct. Y como dijo Quintás, la llegada al mercado español de entidades que no cobran comisiones pero que sólo prestan algunos servicios básicos, ha obligado al sector a replantearse el sistema tradicional de conseguir beneficio en algunos productos y ceder otros de forma gratuita. La tarjeta no puede ser gratisNo se puede luchar contra esas entidades que compiten sólo en algunos productos y luego no prestan los que las entidades tradicionales estaban subvencionando, dijo Quintás. "La única reacción inteligente -agregó- ante ese caso es segmentar la clientela y cobrar a los que sólo usan los servicios gratuitos y no hacen con nosotros las operaciones que dejan margen". Respecto a la subida superior al 20 por ciento de las cuotas anuales en tarjetas de crédito y débito a lo largo de 2006, explicó que el sistema de medios de pago tiene un coste muy elevado y "no se puede no cobrar por ello, porque, si lo haces, al final ese coste se lo tienes que aplicar al que pide una hipoteca". A futuro entiende que "la utilización del terminal (cajero) también tendrá que dejar de ser gratuita".