Inicia contactos con Terrassa, Manlleu y Manresa, y escapa, así, del Frobmadrid/Barcelona. Cuatro cajas catalanas de titularidad privada han iniciado los primeros contactos para llevar a cabo un proceso de fusión. Caixa Sabadell, Terrassa, Manlleu y Manresa han dado este paso, siguiendo así el camino emprendido por las entidades públicas de la misma región, Catalunya, Tarragona y Girona. Caixa Sabadell pilota la fusión. De hecho, el director general de Caixa Sabadell, Jordi Mestre, se perfila como el hombre fuerte de la nueva sociedad si saliera adelante, según explican fuentes conocedoras. El mayor tamaño de la caja y la avanzada edad del director de Terrassa, Enric Mata, explican el más que probable nombramiento de Mestre para gestionar el grupo. Los contactos, que fueron confirmados ayer por algunas cajas, son, por el momento, preliminares. Mientras Caixa Sabadell, la mayor de todas, envió una circular a sus trabajadores en la explicaba de puesta en marcha de "un diálogo" con otras entidades de la comunidad autónoma, para analizar un acuerdo de colaboración, Caixa Terrassa abría la puerta a más instituciones financieras. La más pequeña, Manlleu, indicó que está atenta a los procesos de concentración, porque su tamaño le "obliga" a buscar alternativas con el objetivo de asegurar su futuro. Manresa, en cambio, no quiso pronunciarse. De hecho, ésta todavía no tiene decidido si quiere participar en los planes de reestructuración. Todas ellas ponen como condicionante la dimensión, aunque añaden que el elemento principal es la gestión empresarial para preservar unos niveles de solvencia y capitalización, además de la eficiencia y la calidad en los servicios al cliente. Esta operación, en principio cuenta con el respaldo de la Generalitat. Desde el Gobierno autonómico se ve bien la posibilidad de que estas cuatro entidades se fusionen, pero se resalta la autonomía de sus gestores para decidir sobre la operación. A priori, la Generalitat mantendría su cuota de poder, al no tener ninguna que acudir al Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (Frob). Argumenta que estos movimientos se producen por la situación del sector ante la crisis económica y financiera actual. Tal es así que el Banco de España ha recomendado en diferentes ocasiones a las entidades que inicien operaciones de este tipo para ajustar los costes operativos y salir reforzados de la delicada coyuntura. El Gobierno central también se pronunció sobre este movimiento. La vicepresidenta, Elena Salgado, indicó que se produce "en el ámbito privado" y que, por tanto, no estaría regulada por el decreto ley aprobado ayer para el fondo de rescate. "No han pedido los recursos del Frob; sólo cuando lo hiciera el Ministerio emitiría su opinión. En este momento es una fusión en el ámbito privado que no regula el decreto ley", señaló. La unión de las cuatro crearía la octava mayor caja de ahorros del país y no supondría un solapamiento relevante de oficinas, ya que cada una está presente principalmente en sus zonas de influencia. De confirmarse esta integración y la de las tres cajas públicas, sólo quedarían al margen La Caixa, Caixa Laietana y Caixa Penedés. En múltiples ocasiones, la primera ha rechazado participar en los procesos de fusión que se den en Cataluña. Las otras dos, según fuentes del sector, esperan a ver los movimientos y las indicaciones del Banco de España, una vez que ya están claras las reglas del juego con la aprobación del fondo de rescate. "Todo dependerá de lo que ocurra", indican, abriendo la posibilidad de fusionarse con otras.