Su filial de seguros prevé crecer al 20% vendiendo pólizas en las 600 oficinas de la cajaMADRID. Se llama Caja Castilla La Mancha Mapfre y estará participada al 50 por ciento por los socios que le dan nombre y apellido. Esta nueva aseguradora nace con 210 millones de euros en primas recaudadas, 150 millones gestionados en pensiones y el reto de empujar la cifra a un ritmo anual del 15 al 20 por ciento. Con sólo cumplir el plan de negocio, la nueva compañía será más del doble en cuatro años.Para cubrir los objetivos y dar suculentos beneficios a ambos padrinos, la nueva aseguradora abre guerra en la venta de pólizas de Vida y pensiones, pero no desecha ningún ramo. Su plan es ir incorporando otros seguros a medida que pueda. Las claves de la nueva empresa las facilitaron ayer el presidente de Mapfre, José Manuel Martínez, y su homólogo en Caja Castilla La Mancha, Juan Pedro Hernández Moltó, tras rubricar un acuerdo del que sólo quedó una duda: la inversión de la aseguradora que será, se limitó a indicar, progresiva a medida que avance el proyecto.Y es que Mapfre entra en una empresa que ya estaba operativa: la filial de seguros de la caja. Tomará la mitad del capital, aportará los productos de su fábrica, en detrimento de los que vende otras aseguradoras, y, sobre todo, llevará la gestión.A cambio, Mapfre da un salto de gigante en capilaridad. Comercializará sus pólizas a través de las 600 oficinas de la caja, reforzando la red de distribución en regiones como el Arco Mediterráneo o Andalucía, donde se cuentan por cientos las sucursales de la entidad de ahorros.Con este acuerdo, Mapfre transita por un camino ya explorado: el de aliarse con entidades de ahorros. Con Caja Madrid comparte negocio y filiales desde hace casi una década, y no desecha repetir estrategia y rubricar un pacto similar al de la caja castellanomanchega, siempre consultado antes a los socios. ¿Y estrechar la alianza con el nuevo aliado? La caja que preside Hernández Moltó baraja, incluso, la posibilidad de aumentar la inversión en la nueva Mapfre, de la que ya tiene alguna participación en su cartera industrial que no desveló. "En la medida que sea posible, iremos avanzando mucho en esa vía", aseguró Hernández Moltó. La salida al exterior de las cajasEn otro camino en el que ya se mueve la entidad de ahorros es el de la internacionalización. La caja ultima detalles para desembarcar en Portugal, con la apertura de una delegación en Lisboa para acompañar a clientes-empresas que hacen negocio allí. A juicio de Hernández Moltó, la salida al exterior es ineludible para algunas cajas. Otra cosa, es cómo emprender la aventura. Según el financiero: la regla debe ser "con sentido común".