nueva york. Aquellos que a partir de ahora decidan tomarse una muffin o un scount de la conocida cadena de cafeterías ya no tendrán que preocuparse por las temidas grasas saturadas, ya que Starbucks ha decidido no incluirlas en su menú, al menos en la mitad de establecimientos que la compañía tiene repartidos a lo largo y ancho de EEUU. Desde ayer, Starbucks suspendió la venta de pasteles, dulces y sándwiches que contienen grasas saturadas en las cafeterías de diez ciudades estadounidenses, aunque Brandon Borrman, un portavoz de la empresa, señaló que Starbucks planea eliminar, antes de fin de año, estas grasas de todos sus establecimientos en EEUU y Canadá. La decena de ciudades afectadas, entre las que se encuentran Seattle; Washington; San Francisco; California; Chicago, Illinois; Los Angeles, California; San Diego, California; Boston, Massachusetts; New York; Philadelphia, Pennsylvania; Washington y Portland, han llegado a un acuerdo con los suministradores locales para introducir recetas que eviten este tipo de grasas en sus contenidos.