madrid. Si hubiera que elegir qué futbolista ha sido el icono del Real Madrid de los Galácticos, ése sería David Beckham. Zidane ponía el fútbol y Ronaldo los goles, pero el centrocampista inglés ha aportado siempre su incuestionable imagen.Así lo supo captar Florentino Pérez cuando se gastó en el verano de 2003 25 millones de euros en el jugador del Manchester United y comenzó a multiplicar los ingresos por mercadotecnia del equipo. Su posible marcha hace temblar ahora a las arcas del club, que no es, sin embargo, el único perjudicado. El caché de Beckham está empezando a caer con su declive deportivo. Tras dejar la capitanía de la selección inglesa y quedarse en el banquillo del Real Madrid, su empresa, Footwork Production, se resiente. Algunas compañías, como Gillette, han manifestado ya que no van a renovar los contratos publicitarios en marcha y otras se lo piensan ante su posible marcha del Real Madrid.Hasta ahora, las cifras, sin embargo, no engañan. El astro británico ha sido uno de los mayores vendedores de camisetas del equipo y, lo que es más importante, ha sido el jugador de referencia en el mercado asiático. Si en la temporada 2000-2001, el Real Madrid facturaba 39,1 millones de euros por la venta de camisetas y productos del club, a raíz de la llegada de David Beckham, y tras una gira por Asia, los números se dispararon. Ya en la temporada 2003-2004, la primera campaña que jugó el jugador inglés en las filas blancas, la cifra se había duplicado hasta los 88 millones. A medida que los espectaculares goles de falta de Beckham han dado la vuelva al mundo, los ingresos han seguido aumentado. Para la temporada 2005-2006 se prevé que la facturación por marketing alcance los 136,4 millones de euros. Pero David Beckham puede tener ahora sus días contados en la casa blanca. Pese a sus 31 años y el apoyo total del presidente del Real Madrid, Ramón Calderón, el jugador no cuenta en los planes del entrenador blanco, Fabio Capello, y el inglés quiere ser siempre titular. Con la renovación de su contrato sin resolver y con Victoria Beckham dejándose querer por los paparazzi mientras busca piso en Nueva York (se oyen rumores de que se quiere ir al Galaxy neoyorquino), a los patrocinadores del Real Madrid ya no les salen los números igual que antes. Beckham, que mantiene contratos de patrocinio con marcas como Gillette, Pepsi o Adidas, tiene unos ingresos anuales por este concepto de más de 18 millones de euros y se calcula que su fortuna personal supera los 125 millones. El mejor contrato del mundoEn 2004, en vísperas de la Copa de Europa, el centrocampista blanco firmó uno de los contratos de patrocinio deportivo más espectaculares del mundo con Gillette, una empresa propiedad de la multinacional estadounidense Procter & Gamble. El acuerdo estipulaba que Beckham cobraría 60 millones de euros durante tres años para convertirse en su imagen global, protagonizando anuncios y cediendo todo tipo de derechos publicitarios, llegando incluso a grabar un spot con la cabeza afeitada. El acuerdo vence en abril del año que viene, pero Gillette no tienen ninguna intención de renovarlo. En el mercado publicitario se da por hecho que buscara ídolos locales para rentabilizar su inversión. En Inglaterra, por ejemplo, se habla de Ashley Cole, uno de los últimos fichajes del Chelsea. Beckham está tranquilo por su economía. A pesar de perder a Gillette, su empresa Footwork mantiene todavía contratos publicitarios en vigor con Pepsi (7,5 millones de euros anuales), Motorola (3,75), Vodafone (1,5) y otros de menor cuantía con marcas como Mark & Spencer o Police. Y eso por no hablar del extraordinario acuerdo con Adidas, firmado de por vida por 120 millones de euros, a razón de 4,5 millones al año. Y aunque tiene cedidos el 50 por ciento de sus derechos de imagen al club, hay que recordar que su sueldo en el Real Madrid no es, además, uno de los más bajos: cobra unos 12 millones de euros brutos al año: 6,4 millones netos.Mientras que Beckham hace las maletas, el equipo de Chamartín tiene que seguir aprovechando sus armas en merchandising y una de ellas es que sigue siendo el equipo con más aficionados en el mundo: 228 millones de forofos, según un estudio de Sport+Markt. ¿Se imaginan que cada uno se gastara seis euros en una bufanda del Real Madrid? La cifra es escalofriante.