El presunto delito asciende a 12 millones y afecta a 11 empresas a las que asesorabaLas Palmas. Hacienda investiga desde 2004 un presunto delito fiscal por más de 12 millones de euros. Lo puso en manos de la Justicia y en estas semanas se ha dado por concluida la instrucción de un caso que afecta a 11 empresas asesoradas por Ernst & Young. El Juzgado de Instrucción Número 7 de Las Palmas ha dado por acreditada la presunta comisión de un delito de defraudación a la Agencia Tributaria que supera los 12 millones de euros. El juzgado ha concluido la fase de instrucción y está a la espera de evaluar el expediente procesal para la apertura de juicio. La firma en Las Palmas no quiso hacer ninguna consideración al respecto.Los hechos sujetos a la instrucción corresponden a los años fiscales de 1998 y 1999 y se refieren a un grupo de empresas dedicado a la gestión y explotación de alojamientos turísticos en régimen de tiempo compartido (multipropiedad) que ejerció su actividad en el Sur de Gran Canaria. Según adelantó Canarias 7, el fiscal ha empleado para sus calificaciones un texto de la Agencia Tributaria donde se describen actuaciones que derivan en "la consumación de la defraudación fiscal" mediante "sociedades interpuestas" que "facturaron de manera ficticia unos servicios que, en realidad, nunca prestaron y que derivaron en el consiguiente ahorro fiscal".Tasolan y sus filialesLos inspectores de Hacienda investigaron durante meses el rastro del grupo de empresas liderado por Tasolan y sus filiales, todas asesoradas por Ernst & Young. Las empresas están domiciliadas en el despacho de la consultora. La fiscalía demanda que Tasolan devuelva la Agencia Tributaria unos 12 millones de euros, que es la cantidad resultante del presunto delito fiscal que se le imputa, so pena también de la petición de cárcel que emita el Ministerio Público en su escrito de calificaciones.De acuerdo con los hechos investigados, Palm Oasis Marketing (filial de Tasolan) suscribió contratos por prestación de servicios con seis empresas más, de las que cuatro también concurren en las oficinas de la firma de asesoramiento. Hacienda sostiene que existen vínculos entre la operativa de estas empresas y Ernst & Young, con extranjeros como "testaferros para ocultar la identidad de los verdaderos gerentes"; incluso uno de ellos falleció en 1998 y se emitieron documentos en su nombre.