La mayor parte de las entidades prepara una gama de productos a la medida de los afortunadosmadrid. Los jugadores de la Lotería de Navidad, es decir, el 80 por ciento de la población española, no son los únicos que andan a la caza del Gordo. Un ejército de comerciales está bastante más pendiente de los números que van saliendo de los dos bombos desde las nueve de la mañana de cada 22 de diciembre, que la mayoría de los mortales. Son las huestes que están dispuestas a salir a la calle en cuanto se sabe en qué administración de lotería se han vendido los números con un premio metálico apreciable (normalmente hasta los ocho quintos premios, que se pagan a 5.000 euros el décimo jugado). Y esto es lo que pasó ayer, tras conocerse a las once de la mañana el destino del segundo número de la lotería. Cayó íntegro en una administración de lotería de la madrileña Puerta del Sol, a la que, además de todo tipo de curiosos, se acercaron comerciales de banca intentándose llevar el gato al agua. Es decir, conseguir llevar hasta su banco estos premios. En concreto, un empleado de Banesto pululaba por la zona para captar a alguno de los premiados. "Ha habido suerte, ya he hablado con un señor que llevaba dos décimos", indicó a los periodistas que se dieron cita. También un comercial del Santander intentaba pasarle a uno de los agraciados su tarjeta, mientras ofrecía los servicios del banco para gestionar su nueva fortuna. Aunque sin mucho éxito, porque el ganador tenía claro que seguiría con su banco de toda la vida. "Va a ser difícil encontrar a quienes les ha tocado el dinero, ya que el premio ha estado muy repartido", decía Javier Sánchez del Banco Sabadell. Esta situación no es excepcional y ayer se repitió en todas las administraciones en las que se descorchaba el champán. Pero, ¿tiene la banca una gama de productos establecidos para estos ganadores de la lotería de Navidad? Este año ha sido toda una novedad que el Banco Sabadell, donde trabaja Javier Sánchez, se lance a ofrecer un producto específico para los ganadores de los cinco principales premios. Se trata de un depósito mensual a un mes, por un ingreso mínimo de 20.000 euros y con una rentabilidad de 10 por ciento TAE (tasa anual equivalente). La oferta dura hasta el 5 de enero y se comercializa bajo el eslogan de "celebre con nosotros su buena suerte". Si triunfa esta oferta, seguro que ya tiene planeado otro producto para ofrecer a los ganadores de la Lotería del Niño, que se celebra el 6 de enero, justo el día que termina la promoción del otro depósito lotero. Pero esta estrategia no es la común de las entidades financieras. Caja Madrid, por ejemplo, explica que la caja no tiene ningún producto creado específicamente para la lotería de Navidad, "pero sí que hemos conseguido captar premios de lotería otros años porque se les hace una oferta personalizada", indican en la caja. Lo mismo que el resto de las principales entidades españolas. Mientras que BBVA es de las que prefiere hacer una oferta adaptada al perfil del ganador, el Santander lanzó un órdago a su competencia, al asegurar que es capaz de batir las ofertas del resto de entidades. Además, todos sus comerciales están preparados con antelación para el día del sorteo. En las cajas castellano leonesas, como Caja Duero y Caja España que este año podrían ser una de las triunfadoras del sector porque el Gordo ha ido a parar a tierras sorianas, explican que no hay productos específicos pero que en otras ocasiones en las que les ha tocado gestionar estos premios han utilizado productos estándar. Y, si se le quiere dar un mayor toque lotero a estas gamas de productos, "se les cambia el nombre comercial por otro más acorde con la procedencia del dinero", indican en Caja España. Bancaja también puede ser otra de las entidades que gane con el Gordo, con lo que ya sumaría dos años de victoria. "El pasado año fue sencillo llegar a los clientes porque la caja era la depositaria de los décimos de lotería", indica la entidad. Otras, como Caixanova, reconocen con cierta pena que no son tan afortunadas en los ganadores, porque "en Galicia nunca toca".Y lo que podría rizar el rizo es que BBK, que por segundo año ofrecía con sus productos décimos de lotería, le hubiera tocado un pellizco a repartir con sus clientes. Todo vale en las finanzas.