Los accionistas de la italiana celebran hoy en Roma una junta que será un 'puro trámite'barcelona. Como si se tratase del último minuto de una película de suspense, la concesionaria española Abertis ha asumido que su ansiada fusión con Autostrade deberá esperar. "La operación se encuentra bloqueada y por el momento Abertis abandona la fusión con Autostrade. En todo caso se podría replantear en un futuro pero con otras condiciones distintas a las actuales por el bloqueo de las autoridades italianas a la fusión", comentaron anoche a este diario fuentes conocedoras de la operación. El epílogo de esta intriga se llevará a cabo hoy fuera de España, en Roma, donde se celebrará la junta de accionistas de Autostrade. Al acto asistirá el consejero delegado de Abertis, Salvador Alemany, que es consejero de su participada italiana. Alemany lleva desde comienzos de esta semana en Roma negociando las distintas posibilidades para salvar y mantener viva una fusión que cuenta con el rechazo del Gobierno italiano y que, previsiblemente, tendrá hoy otro escollo: queda la incógnita de cómo resolverá hoy la junta de accionistas de Autostrade el pago de un dividendo extraordinario de 3,75 euros por acción, que asciende a 2.140 millones, y que es un punto clave para que la fusión pueda llevarse a cabo. A pesar de la "derrota" en la fusión, el director general corporativo de Abertis, Jose Martínez-Vila, dejó ayer claras las intenciones de la concesionaria participada por La Caixa y ACS: "si no prospera la fusión, no abandonaremos el proyecto". Si lo intenta en 2007, Abertis debería presentar unas condiciones distintas puesto que ni el precio de Autostrade sería el mismo, ni la fusión entre iguales podría mantenerse como se presentó hace unos meses. La fusión, que crearía el primer grupo de autopistas del mundo sería posible cuando se clarifiquen las tarifas. Abertis ya mira a otros mercados. Es el caso de Estados Unidos, donde ha abierto una oficina en Washington para sondear fuentes de financiación que le permitan acudir a 30 proyectos de privatización de autopistas en 2007.