El Consejo de Administración reconoce que su presidente incurre en un conflicto de intereses con Campofríomadrid. Los accionistas de Telepizza se han quedado este año sin dividendo. Al contrario de lo que hizo en 2005, la compañía ha decidido traspasar a reservas los 14,9 millones de euros que ganó el año pasado. Entonces, se quedó con 8,2 millones de euros, pero repartió otros 8,9 millones entre sus accionistas, a razón de 4 céntimos por título. Telepizza asegura que lo hace en cumplimiento del deber de abstención y neutralidad previsto por la ley de opas -la CNMV ha aprobado ya una oferta de su presidente, Pedro Ballvé, y tiene sobre la mesa otras dos, de Zena e Ibersol-, pero la normativa no es tan clara. Lo que dice el reglamento es que las empresas no pueden realizar actividades extraordinarias "que tengan por objeto principal perturbar el desarrollo de la oferta". Y ese no es el caso de un dividendo. "No hay ningún problema para que una compañía decida retribuir a su accionista, tal y como hace normalmente, aunque la empresa sea sujeto de una opa", confirmó ayer el regulador. De hecho, empresas como Endesa o Arcelor han anunciado incluso fuertes dividendos extraordinarios para hacer frente a opas hostiles.El verdadero problema en esta ocasión es que Ballvé y su socio, la sociedad de capital riesgo Permira, quiere quedarse con el cien por cien de la compañía. Y no están para demasiados repartos. Sobre todo, porque tienen que superar los 2,41 euros que está dispuesto a pagar Ibersol. Su intención es endeudar a Telepizza para hacerse con su control. Los analistas prevén que la empresa genere una caja los próximos años de entre 25 y 50 millones de euros anuales y Ballvé no quiere dejar escapar esa oportunidad.El presidente de la cadena de comida rápida se ha encontrado, no obstante, con un problema inesperado. Según consta en el informe de gobierno corporativo de la compañía, el consejo de Telepizza reconoció el año pasado que incurre en un conflicto de intereses con Campofrío, empresa que también preside. La cárnica se ha lanzado a vender pizzas refrigeradas, con lo que ambas sociedades compiten directamente, y el consejo de Telepizza no deja que Ballvé participe en las deliberaciones o votaciones del consejo cuando se habla de pizzas. Tampoco puede hacerlo en Campofrío.