londres. "Estamos todavía a tiempo de salvar el medio ambiente sin grandes sacrificios, pero a condición de que aumentemos la eficacia del uso de la energía con enormes ahorros. Además, tenemos que apostar por la energía nuclear limpia porque las fuentes alternativas sólo pueden sustituir en una mínima parte a los hidrocarburos fósiles". De paso por Londres, donde el informe Stern sobre el cambio climático indujo a Tony Blair a colocar la ecología en los primeros puestos de la agenda política, el consejero delegado de Eni, Paolo Scaroni, de 60 años, avanzó varias propuestas ecológicas, algunas procedentes de su propia experiencia (ha dirigido Enel, el coloso eléctrico italiano).Por otra parte, Eni acaba de conseguir la luz verde de Naciones Unidas para un proyecto en Kwale (Nigeria), donde eliminará la com- bustión del gas que se produce durante la extracción del petróleo (el efecto antorcha), reciclándolo en una central eléctrica de ciclo combinado de 480 megavatios, en beneficio de la economía local.PEl informe Stern hizo saltar todas las alarmas y crecen las advertencias sobre el efecto invernadero, como las del ex vicepre- sidente estadounidense Al Gore. ¿Considera que son fundadas?R Hay argumentos a favor y en contra del tema, con razonamientos sostenidos por ilustres científicos. Creo que se está produciendo una transformación, porque asistimos a una subida sin precedentes de la temperatura terrestre.P¿El protocolo de Kioto contribuye a encontrar una solución?R Ha indicado un camino, pero se ha quedado en un ejercicio de mayéutica. En el mejor de los casos, Kioto nos permitirá, de aquí a 2012, ahorrar el equivalente a una octava parte del aumento de las emisiones de China.PA primera vista, el problema parece irresoluble...R La tecnología nos ofrece soluciones que podemos adoptar sin cambiar sustancialmente nuestra forma de vida. La primera, que no suscita controversias, es el uso eficaz de la energía. La segunda es la apuesta por la energía nuclear, que gracias a las tecnologías que dominamos en la actualidad, permite producir energía como, cuando y en la cantidad que necesitamos. Por último están las energías alternativas, que conviene potenciar, pero teniendo en cuenta que sólo pueden reemplazar a los combustibles fósiles de manera limitada.PExaminemos las soluciones.R En el caso del uso eficaz de la energía, el ahorro potencial es enorme, tanto en las casas como en los transportes, la industria o el sector eléctrico. Un ejemplo: si en Occidente todos tuviésemos coches que recorriesen 20 kilómetros con un litro, ahorraríamos la producción total de Arabia Saudí. Hay que pensar que el despilfarro tiene un coste económico, social y político, en términos de inseguridad. El que conduce un cochazo debe saber que está aumentando la demanda de los productos petrolíferos y los precios de los carburantes para el pescador de Mozambique, lo que acrecienta el abismo entre el Norte y el Sur.PEn cuanto a despilfarro, EEUU ocupa la cumbre mundial.R Un americano consume de media 26 barriles de petróleo al año. Un europeo, 12. Si los americanos consumiesen como los europeos, se ahorraría lo equivalente a la producción de Arabia Saudí. Y los europeos también podríamos bajar fácilmente a 10 barriles por cabeza. Si todo eso se consiguiese, el consumo mundial (el 70 por ciento del cual corresponde a los países desarrollados) bajaría un 20 por ciento. Eso permitiría, entre otras cosas, la ampliación de la vida de los hidrocarburos fósiles de los 70 años actuales a los cien, un fenómeno que beneficiaría a otra generación más. Que no es poco.PPero EEUU no parece dispuesto a recortar el consumo.R Sólo digo que no se trata de un problema irresoluble. En Europa, por ejemplo, la subida de los impuestos moderó el consumo.PPasemos a las energías alternativas.R Un kilovatio/hora convencional cuesta 57 céntimos de euro. Con la energía fotovoltaica (solar), en cambio, son 2,860 céntimos. Por mucho que se pueda bajar esa cantidad, la distancia es grande. Probemos con el biocombustible: si cultivásemos colza en toda Italia (de ahí se extrae el biocarburante), sólo cubriríamos el 14 por ciento del consumo petrolífero nacional, o el 50 por ciento del consumo de gasóleo de los coches. En cuanto a la energía eólica, ¿cree usted que Italia es un país con mucho viento? De las 8.760 horas de un año, en el lugar con mayor viento del país, un molino funcionaría 2.500 horas, frente a las 4.000 de España o las 6.000 de las islas Shetland. En España, la energía eólica está muy extendida y cubre ya el 7 por ciento del consumo.PNos queda la energía nuclear.R Las nuevas tecnologías nos permitieron dar pasos de gigante. En Italia, sin ir más lejos, se satisface la demanda eléctrica sólo con la energía nuclear. Hoy día tenemos 30 reactores en 10 lugares. Además, los desechos radioactivos de un año entrarían en una habitación de unos 300 metros cúbicos, y podrían ser tratados en caso de que las nuevas tecnologías nos permitiesen dar pasos en esa dirección. Por otro lado, está cambiando la actitud respecto a la energía nuclear: incluso un importante líder de Greenpeace de América se acaba de convertir a la energía nuclear limpia. Ante los daños potenciales del efecto invernadero, muchos verdes están haciendo examen de conciencia.