madrid. Porsche, accionista principal del consorcio automovilístico Volkswagen con el 27,4 por ciento de los títulos, descartó adquirir completamente esta compañía, aunque reclamó más poder en ella. Los mercados habían especulado con que Porsche deseaba comprar Volkswagen, después de que el fabricante de deportivos dijese que desea aumentar su paquete de acciones en Volkswagen hasta el 29,9 por ciento y anunciase que quiere ampliar su capital, sin especificar el uso que le dará, informa Efe. El presidente de Porsche, Wendelin Wiedeking, afirmó esta semana, en la rueda de prensa de presentación de los resultados, que la adquisición completa de Volkswagen "no forma parte de nuestros planes, de momento". También respondió con una negativa a los rumores de que la compañía podría comprar la filial de vehículos de lujo de Volkswagen, Audi, ya que, en su opinión, desintegrar el consorcio y desaprovechar las sinergias que ya se producen "no tendría ningún sentido". Al mismo tiempo, Wiedeking reclamó más poder en el grupo, al considerar que la participación que Porsche posee en Volkswagen justificaría que tuviese tres representantes en el consejo de vigilancia de Volkswagen, frente a los dos que la marca tiene en la actualidad. Wiedeking y el director de finanzas de Porsche, Holger Haerter, forman parte actualmente del gremio de supervisión de Volkswagen, que preside el anterior número uno y propietario de parte de Porsche, Ferdinand Piech. La presencia de Piech en este órgano, que levantó polémica en el pasado por el posible conflicto de intereses que surge al ser propietario y presidir el consejo, ha sido defendida por Wiedeking, que consideró que Piech está en calidad de ex jefe de Volkswagen y que no puede considerarse que represente los intereses del fabricante de coches deportivos. Aun así, los expertos aseguran que Porsche y Piech han ampliado su influencia en Volkswagen con los cambios en la cúpula directiva a partir del próximo 1 de enero. De hecho, tanto el futuro presidente de Volkswagen, Martin Winterkorn, como el nuevo jefe de Audi, Rupert Stadler, están considerados personas de confianza de Piech, con quien trabajaron anteriormente. La compra de los títulos de Volkswagen ha costado a Porsche unos 4.000 millones de euros y, tras comprar la participación, la compañía "se ha convertido en otra empresa", a juicio de su presidente. Wiedeking está convencido del potencial de Volkswagen y de su capacidad para competir.