En la campaña de final de año, los inversores de planes de pensiones deben ver algo más que regalos a la hora de invertir en estos productos. De hecho, si hubieran depositado sus ahorros en los más rentables, con las ganancias obtenidas tendrían jamones para grandes fastos. Por Isabel Gil y Vicente VaróCuando Javier Mira, director general de Mutuactivos, tenía 17 años, su padre se presentó un buen día en casa muy feliz y con una moto entre sus manos: "Fíjate que Derbi te traigo, me la han dado en el banco por abrir una cuenta". Javier, que todavía no tenía experiencia en el mundo financiero, le frenó en seco con una pregunta: "Ya, ¿pero qué intereses te da el banco?". "¿Cómo? Pues no me da intereses, sólo la moto" respondió perplejo el padre. La siguiente respuesta de su hijo le dejó helado: "Si hubieras metido el dinero en una cuenta con más intereses, a lo mejor nos podíamos haber comprado más motos y, además, las habríamos elegidos nosotros".Y eso es exactamente lo que pasa con los planes de pensiones. Los regalos que acompañan cada año a estos productos, como jamones, vajillas, edredones, motos o televisiones, han sido el gancho comercial más utilizado por bancos y cajas en España para atraer dinero a sus productos durante los últimos años. Resulta difícil encontrar un hogar que no tenga en alguno de los productos de fidelización ofrecidos por estas entidades. Aprovechando las costumbres de la época navideña, el jamón ha sido uno de los regalos más populares en la banca. ¿Pero le interesa al inversor aceptar el jamón o sacará más partido a un plan de pensiones con jugosas rentabilidades? ¿Quiere seguir el ejemplo del padre de Javier Mira o tiene una filosofía más parecida a la del hijo? ¿Un jamón en mano o ciento volando? La experiencia demuestra que la opción más sabrosa y abultada es la segunda. De hecho, si hubiera invertido hace tres años en los planes más rentables del mercado, se hubiera podido comprar hasta once jamones cada año. ¿Por qué? Teniendo en cuenta una inversión media de 8.000 euros al año en un plan de pensiones (es el máximo que hasta ahora se puede desgravar), el inversor que optara hace tres años por los planes de pensiones más rentables puede costearse con las ganancias obtenidas once jamones por año, a un precio medio de 150 euros por cada jamón como el de las promociones de las grandes entidades.Según los datos de la asociación de fondos de inversión y planes de pensiones Inverco, Bestinver Ahorro es el plan de pensiones más rentable desde 2003, con una ganancia del 20,55 por ciento. Es decir, que el participe que se haya decantado por este plan habrá ganado 4.932 euros. Un importe que le permite comprarse esas once patas de ibérico por año. Algo similar ocurre con los planes de pensiones Duero Inversión, BK Pensión Dividendo, que logran un rendimiento del 18,05 por ciento en los tres últimos años, y Caser Variable (16,58 por ciento). Incluso, si el inversor tiene debilidad por la tecnología, con estas ganancias acumuladas en tres años podría llevarse tres televisiones de pantalla plana de la marca Samsung de 37 pulgadas, de 1.499 euros cada una. Pero si se dejó llevar por la promoción de turno de cualquier entidad financiera ligada a un plan de pensiones de campaña, ya se habrá comido el jamón pero con las rentabilidades obtenidas no podrá casi ni llenar la despensa para esta Navidad. Por ejemplo, BBVA Plan Individual, el plan con más partícipes de todo el sector (340.810 inversores) y que cobra el máximo en comisiones (2,50 por ciento), gana el 2,65 por ciento desde 2003, según los datos de Inverco. Si fue de los que invirtió 8.000 euros en este producto, habrá ganado 636 euros en tres años o 4,24 jamones. CampañasCon lemas como "Nuestros planes de pensiones le dejarán un buen sabor de boca", de la campaña publicitaria de este año de Winterthur, las entidades financieras se enzarzan en los dos últimos meses del año en una guerra comercial, en la que gana la que más y mejores regalos ofrece por contratar sus planes de pensiones. Las consecuencias de estos regalos se traducen en mayores comisiones. ¿Por qué? Javier Mira lo explica: "El banco también tiene que pagar esa televisión al fabricante y cubrir los costes de márketing de esta promoción". Esto se traduce en mayores comisiones en el plan y, por lo tanto, menor rentabilidad final".De hecho, los planes con mayor patrimonio del mercado español no son los más rentables pero sí los que cobran mayores comisiones. En total, los cinco productos que más capital tienen mueven 6.305,25 millones de euros, su rentabilidad media en doce meses es del 3,2 por ciento y las comisiones de gestión y depositaría se sitúan en el 2,5 por ciento, el máximo legal permitido. Sin embargo, los cinco planes más rentables, que ofrecen una rentabilidad media del 28,6 por ciento, mueven 239,9 millones y sus comisiones, en casi todos, son más moderadas, lo que ayuda a dar mejores ganancias. Lluvia de cazuelasSin embargo, la campaña de este año se distancia de las pasadas. El reclamo del jamón está perdiendo peso en favor de las bonificaciones. Incluso, algunas entidades han comenzado a criticar en sus propias campañas los clásicos regalos. Pruebe a entrar en la página web de Barclays, en el apartado de planes de pensiones. De repente, se abre una ventana en la que una cacerola cae desde lo alto de la pantalla. Y se lee este enunciado: "Imagine cuántas cacerolas podría comprar depositando...". En este momento, usted introduce en una especie de calculadora la cantidad que desea meter al año en un plan de pensiones. Si la cifra que introduce es mayor a 3.000 euros -el mínimo para disfrutar de la promoción-, acto seguido aparece una imagen que muestra a qué altura llegarían apiladas las cacerolas que podría comprarse con el dinero que le ofrece esta oferta. Si marca 6.000 euros, las baterías de cocina le llegarán hasta tres metros de altura. ¿Cuál es el fin? Barclays liga sus planes de pensiones a un depósito a dos meses al 12 por ciento. Aunque también Hacienda se quedará con parte de los beneficios de este depósito, cuando el cliente cobre las ganancias obtenidas, pero no tendrá que declararlo el año siguiente, como en el caso de los regalos o las bonificaciones (ver noticia relacionada). La filosofía de Mutuactivos sobre los regalos también la comparte Cristóbal Thomas de Carranza, consejero delegado de Fonditel Gestión, la gestora de fondos de inversión y de pensiones del grupo Telefónica: "No tiene sentido que el ahorrador a la hora de pensar en un producto para cuando se jubile se decante por un fondo u otro en función del regalo que le ofrezcan las entidades cuando va a suscribir el producto. Lo normal sería buscar los planes que históricamente han tenido mejor comportamiento anual", comenta. Y no hay ejemplo más cercano que el de la vivienda: "Sería como si a la hora de comprar un piso en el que va a vivir toda su vida, se quedara con uno de peor calidad en su construcción porque la inmobiliaria le regala también el trastero", explica Cristóbal Thomas de Carranza. ¿Qué piso elegiría usted?