madrid. Ferrovial recibió ayer un auténtico jarro de agua fría. La Autoridad de Aviación Civil británica (CAA) anunció que prevé reducir las tarifas aeroportuarias para el quinquenio 2008/2013. La noticia golpea directamente los intereses de Ferrovial, que el pasado verano adquiró BAA, la mayor compañía de aeródromos del mundo, dueña de Heathrow, Gatwick y Standted, entre otros.El mercado castigó duramente a la compañía española, que ayer cerró su peor jornada brusátil en los últimos cinco meses: cayó un 3,21 por ciento, hasta 75,30 euros por acción. No obstante, Ferrovial confía en levantar el vuelo y llegar a un acuerdo lo más beneficioso posible con CAA.Durante el próximo mes, negociará con las autoridades británicas las nuevas tarifas. Hasta diciembre, no se prevé una cifra exacta sobre el nuevo escenario tarifario que prevé imponer la CAA. No obstante, desde Ferrovial replican que este cambio responde al incremento de pasajeros y mejor funcionamiento de los aeropuertos, que permitirá a los gestores de estas infraestructuras elevar sus ingresos.La compañía española también negocia la posibilidad de abrir una segunda pista en Stanted para potenciar el aeródromo.