Valora que captará recursos y avanzará en su salida al exteriormadrid. La propuesta de La Caixa de sacar a bolsa su holding de empresas participadas podría perfilarse, si no se anda con pies de plomo, como un nuevo frente de problemas entre el Gobierno de España y la Unión Europea. O al menos, así lo ve el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, que ayer advirtió de que la normativa comunitaria podría interpretar como "ayudas públicas" de tipo financiero los movimientos de la caja presidida por Ricardo Fornesa.La creación del holding y su posterior salida a bolsa "sin duda dará lugar a cierto debate europeo", aseguró Solbes. Ante ello, lanzó la recomendación a La Caixa de que siga adelante con su iniciativa, que tildó de "inédita e imaginativa", sin arriesgar la matriz. Éste es el principal riesgo que contempla la iniciativa de la caja catalana. ¿Cuáles son las principales ventajas? De materializarse este holding, "una institución muy madura" como La Caixa -según Solbes- podrá captar nuevos recursos para su actividad financiera, podrá avanzar en su internacionalización y demostrará su capacidad real en la toma de decisiones empresariales. Además, "que una empresa cotice en mercado tiene la ventaja de ser valorada por analistas de todo tipo", insistió el vicepresidente.Campeones mundialesEn relación a la OPA de E.ON sobre Endesa, Solbes dejó claro que siempre ha sido partidario de "campeones mundiales". Su justificación: "Vivimos en un mundo globalizado y las empresas tienen que jugar por sus propias características". Por ello el ministro de Economía y Hacienda reconoció que le gustaría que hubiera empresas españolas tan potentes como para "jugar en el Mundial".Solbes, que aseguró que se trata de un problema de "gran complejidad", insistió en que "no deja de ser relativamente injusto" que como consecuencia de una legislación "desequilibrada" entre España y la UE se produzca la paradoja de que "mientras empresas españolas no pueden comprar empresas de su misma nacionalidad, sin dificultades, las extranjeras puedan comprarlas cómodamente".Solbes admitió que en la operación ha aparecido "un problema específico" al que el Gobierno no había prestado "atención".