Los Presupuestos de hoy incluirán partidas para respaldar la economía británicaEl Gobierno británico mantiene una aproximación comedida, guiado por las estimaciones de que el pico del coronavirus no tendrá lugar hasta dentro de una quincena. Las medidas draconianas de los países de su entorno contrastan con el mero lavado de manos con jabón recomendado en el Reino Unido, pero las cifras al norte del Canal de la Mancha, tanto de contagios, como de muertes, son todavía notablemente inferiores a las de Italia, España o Francia. El agravamiento, sin embargo, es cuestión de tiempo, lo que aumenta el riesgo de la apuesta por la moderación, si una vez declarado el brote, acaba siendo considerada una dilación innecesaria. Desaconseja precipitaciónEn su defensa, Boris Johnson insiste en que sigue el consejo de los expertos, que dicen que actuar precipitadamente provocaría un efecto hartazgo, justo cuando las acciones más drásticas fuesen verdaderamente necesarias. De hecho, el Ejecutivo británico mantiene la vigilancia permanente y hoy mismo organiza una nueva reunión del gabinete de crisis Cobra, la segunda de la semana, para decidir estrategia en función del diagnóstico del Grupo Científico Asesor en Emergencias, responsable de facilitar un cuadro de situación a la luz de los últimos datos y la inevitable transición de la actual fase de contención a la de retraso de la epidemia. La esperanza es demorar lo peor de la crisis hasta entrada la primavera, cuando la presión sobre el sistema sanitario sea menor y los protocolos de actuación estén preparados, tanto los que hoy anunciarán los presupuestos, primeros desde el Brexit, hasta los coordinados por los departamentos de Sanidad o Trabajo.Autoaislamientos La prioridad es que los empleados no sufran por las restricciones necesarias ante la pandemia, sobre todo los más desprotegidos, como los cinco millones de autónomos y los dos millones que no ganan lo suficiente para recibir la paga por enfermedad. Adicionalmente, el Gobierno ha recomendado a quienes regresen de Italia que se autoaíslen 14 días y que solo viajen al país transalpino si es esencial. En las próximas dos semanas se espera que estas constricciones se extiendan ante el mínimo síntoma, o fiebre; una orden que podría complementarse con el veto a grandes aglomeraciones, el cierre de colegios y otras cortapisas que amenazan seriamente la economía. De ahí que el ministro del Tesoro prevea anunciar hoy, tras cuatro semanas en el cargo, partidas específicas para las empresas, similares a las del colapso de 2008, para proteger su continuidad y mantener el préstamo.