El brote de coronavirus en el norte de Italia alimenta las tensiones entre el Gobierno central y las autonomías, sobre todo Lombardía, bastión de la Liga y de momento principal foco de contagio. El Gobierno nacional intentó ayer poner orden en las medidas de seguridad que se están tomando a nivel local. Mientras, el contagio se extiende a otras regiones –en particular a Liguria y Sicilia, en ambos casos por turistas procedentes de Lombardía–, el Ejecutivo ha tenido que suspender las órdenes de algunos gobiernos locales, empezando por las de Marche, región de la Italia central sin casos de contagio, que había decidido cerrar igualmente las escuelas."Si no nos movemos juntos, no conseguiremos hacer frente a la difusión del virus", dijo el primer ministro Giuseppe Conte en una entrevista a la televisión pública RAI, añadiendo, "tenemos que prepararnos incluso para tomar medidas que limiten los poderes de los presidentes regionales. Si tuviera que aumentar el nivel de emergencias, tomaremos estas medidas extraordinarias". Además, en otras declaraciones, el primer ministro explicó que el brote del virus en el norte de Italia se debe a "un hospital que no actuó conforme a los protocolos", en referencia al primer auxilio del hospital de Codogno, donde acudió uno de los primeros pacientes afectados por el virus.La amenaza de reducir la autonomía local y las acusaciones al sistema sanitario –en Italia totalmente controlado por las regiones– resultaron una provocación por el Gobierno de Lombardía, bastión de la derechista Liga, que desde décadas ha hecho de la autonomía local su principal petición política. "Una declaración inaceptable por parte de una persona ignorante, porque ignora los que eran y son los protocolos definidos por el Instituto Superior de Salud. Aflora así la incapacidad del Gobierno nacional en la gestión de esta emergencia" declaró el concejal de Salud de Lombardia Giulio Galliera. La prensa italiana indica además que Conte y el presidente de Lombardía, Attilio Fontana, protagonizaron ayer un enfrentamiento durante la reunión entre los presidente de las regiones y la Protección Civil. "Acordamos hacer una orden para uniformar los protocolos en todas las regiones que no incluyen focos de contagio. Hay un clima de colaboración. Debemos seguir con la coordinación", declaró Conte al termino de la reunión.También el secretario nacional de la Liga, Matteo Salvini, atacó al Gobierno. "Es mezquino trasladar la responsabilidad a nivel local", aseguró el líder derechista, indicando que "para salvar las empresas y la economía" de las zonas afectadas "sirven por lo menos 10.000 millones de euros".