Aproximadamente el 15% de los ingresos de Apple procede de China, donde el fabricante del iPhone emplea directa o indirectamente alrededor de 650.000 personas. Es por ello que el azote del coronavirus ha terminado por contagiar a la de Cupertino, California, que a comienzos de semana reconoció que no logrará alcanzar sus proyecciones de ventas, de entre 63.000 y 67.000 millones de dólares, previstas para el trimestre en curso. "La actividad está comenzando a reanudarse en todo el país, pero estamos experimentando un retorno más lento a las condiciones normales de lo que habíamos anticipado", señaló la compañía liderada por Tim Cook a sus inversores. Esta es la segunda vez en poco más de un año que el fabricante del iPhone se ve obligado a ajustar sus perspectivas debido a los cambios repentinos en el gigante asiático. Es importante recordar como incluso antes de la epidemia de coronavirus, China se vio sacudida por las tensiones comerciales y las rencillas entre Pekín y la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En esta ocasión Apple indicó que, aunque sus fábricas de iPhone están fuera de la provincia de Hubei, la zona cero del brote, y sus instalaciones han reabierto, la producción se ha ralentizado y la escasez de suministro afectará temporalmente a sus ingresos en todo el mundo. De esta forma, el coronavirus ahoga tanto la oferta como la demanda de Apple, dado que sus fábricas reanudan su actividad a un ritmo mas lento de lo esperado la mayoría de sus 42 tiendas en el país permanecen inactivas."Esto tendrá un efecto dominó en la cadena de suministro de semiconductores, ya que el aviso de Apple sugiere un entorno de demanda débil en China que también afecta a otros proveedores de teléfonos inteligentes y sus respectivas cadenas de suministro", recalcó el analista de Bank of America, Vivek Arya, en una nota. "Por lo tanto, el impacto es mayor que el de Apple", añadió. En este sentido, Qorvo, proveedor de semiconductores de radiofrecuencia para Apple, podría ser una de las víctimas colaterales, dado que Credit Suisse estima que el 30% de los ingresos de la empresa provienen de la de Cupertino.Algunas estimaciones sugieren que el país asiático representa hasta un tercio del total del mercado global de bienes tecnológicos. Solo en diciembre, por ejemplo, se asume que Apple despachó 3,2 millones de iPhones a China, un aumento del 19% con respecto a 2018. En el conjunto de su primer trimestre fiscal de 2020, que incluye los meses de octubre a diciembre de 2019, la compañía ingresó en la segunda mayor economía del mundo un total de 12.571 millones de euros. En su segundo trimestre fiscal de 2019 (enero a marzo), las ventas en dicho mercado generaron 9.460 millones de euros. En 2019, todas las marcas de teléfonos móviles, Apple incluida, enviaron más de 360 millones de unidades an China."Mientras tratamos de medir el impacto y el potencial rebote en el trimestre de junio, seguimos siendo optimistas con Apple y la tesis del superciclo 5G a largo plazo a pesar de esta noticias", señalaron en una nota a sus clientes, los analistas de Wedbush, Daniel Ives y Strecker Backe. No obstante, Wall Street sigue preocupado ante los indicios de que a Foxconn, que fabrica iPhones para Apple, le está costando reanudar la producción.Esto entorpece, según Bloomberg, los planes de Cook y sus chicos Apple para lanzar al mercado un nuevo iPhone de bajo coste de alrededor de 400 dólares.