El mercado mundial de ordenadores logró crecer el año pasado, algo que no sucedía desde el 2011. Tanto en el ranking de IDC como en el Gartner, el sector del PC cerró 2019 con saldos positivos (0,6% y 2,7%, respectivamente), con ventas de ordenadores de sobremesa, portátiles y servidores de entre 261,2 millones y 266,6 millones. De esta manera, las dos principales casas de análisis del negocio ratifican la buena salud de una actividad que no gozaba de especiales perspectivas desde hace más de una década y de la que muchos daban por moribunda. Nada más lejos de realidad, especialmente dada la incipiente renovación de estos equipos con actualización de Windows 10, en espera del tirón comercial que en el futuro ejercerán las pantallas flexibles, los dobles luminosos o la conectividad de 5G, como se ha visto recientemente en la feria tecnológica del CES. A todo lo anterior se añadirá la previsible renovación de ordenadores que todavía funcionan con el sistema operativo Windows 7, plataforma que ayer dejó de recibir soporte por parte de Microsoft.El espectacular crecimiento del sector registrado en el cuarto trimestre del año pasado, con mejoras del 4,8% (IDC) y del 2,3% (Gartner), contribuyó en el cierre de un ejercicio que marca un punto de inflexión en el negocio.El empate técnico que compartieron Lenovo y HP en 2018, con el 23,1% cada uno según IDC, se rompió en los doce últimos meses en favor del fabricante chino, que en 2019 creció hasta el 24,3%, frente al 23,6% de HP. Dell mantiene el tercer puesto del escalafón, con el 17,5%, también con repuntes interanuales. El resto de los fabricantes cedieron negocio durante el año pasado: Apple (6,6%), Acer Group (6,4%) y otros (21,7%). Según el escalafón de Gartner, Lenovo cerró el año pasado con una cuota del 24,1%, con un crecimiento interanual del 8,1%, mientras que HP mejora un 3% para fijar su participación del mercado global en el 22,2%.