El ministro Montilla pide "flexibilidad" a las partes para llegar a acuerdosmadrid. La fábrica de Volkswagen Navarra dejó de fabricar ayer 302 coches con motivo de los paros parciales de dos horas por turno que secundó la plantilla para exigir a la dirección de la multinacional que retome la negociación del convenio colectivo. Los sindicatos estudian ya un nuevo calendario de paros parciales para las dos próximas semanas, "como mínimo" con el objetivo de presionar a la empresa después de 16 meses de negociaciones infructuosas. Mientras tanto, el ministro de Industria, José Montilla, se defendió, en una entrevista con La Tribuna de la Automoción, de las críticas del Gobierno foral de Navarra que le acusa al ministro de estar haciendo más bien poco por la salida de la crisis laboral que atraviesa la empresa, considerando que "no genera más que incertidumbre". Montilla insistió en en que las partes deben negociar, lo que "quiere decir ser capaz de ceder y de llegar a acuerdos, quiere decir flexibilidad". En la misma entrevista, el ministro señala que de lo contrario "es perder oportunidades".Por su parte, el presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro, manifestó ayer que "el problema no es solo de la fábrica de Navarra, el problema de es mundial porque Volkswagen no encuentra sitio para Seat". Gómez Navarro, en un encuentro organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie), recordó los problemas por los que atravesó General Motors (GM) en Figueruelas (Zaragoza) y los de Renault en Valladolid, "pero el problema que Volkswagen no encuentra sitio para su marca en el mercado mundial". No obstante, el máximo representante del organismo cameral confió en que "la marca se estabilice y encuentre su sitio".