Kutxabank finalizó el tercer trimestre de 2019 con un beneficio neto de 267,1 millones de euros, un 5,1 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado. La aportación de Cajasur es de 22,8 millones, un 12,2 por ciento más que en el tercer trimestre de 2018. Según el banco vasco, una de las claves ha sido el buen ritmo en la contratación de productos de financiación a familias, que se incrementó un 23,6 por ciento, con un total de 2.786 millones y una gran parte en forma de créditos hipotecarios. Kutxabank ha mantenido un incremento cercano al 25 por ciento durante el ejercicio en el saldo de la firma de los créditos inmobiliarios, lo que continuó estable durante el tercer trimestre. Así, cerró septiembre con un crecimiento interanual del 25,7 por ciento, tras captar más de 16.000 operaciones desde enero.Negocio recurrente El negocio bancario recurrente del grupo mantuvo su buena evolución, gracias a la mejora del 2,2 por ciento en el margen de intereses y por el negocio asegurador y la estabilidad en las comisiones por servicios. La morosidad ha descendido 56 puntos básicos en lo que va de año.