Después del auge que tuvieron los remolques de comida conocidos como food trucks, ahora los fabricantes de este tipo de vehículos están diseñando y adaptando camioncitos para todo tipo de negocios como estéticas caninas, salones de belleza, arreglo de uñas, consultorios y hasta cines.Los food trucks nacieron en Inglaterra y Estados Unidos (EU) después de las guerras y la recesión económica que dejó desempleadas a miles de personas quienes encontraron en estos remolques una alternativa para vender comida en diversos lugares. En México, estos remolques se pusieron de moda entre 2013 y 2015. Incluso se formaron varias asociaciones que agrupaban a estos negocios, muchos de ellos liderados por chefs profesionales, pero debido a que nunca se concretó una ley que los regulara y a que desapareció la figura de los Repecos (Régimen de Pequeños Contribuyentes) muchos de ellos desaparecieron.Pero ahora, la demanda está orientada hacia la fabricación y adaptación de vehículos para todo tipo de negocios desde cafeterías, heladerías, crepas, colocación de uñas, estéticas caninas, laboratorios de Rayos X, consultorios, tiendas de pintura o cines, además de las tradicionales activaciones de marca que son promociones específicas de comida, celulares o bebidas alcohólicas.Abraham López, gerente de Food Truck, fabricantes en el Estado de México, dijo que la demanda para la fabricación de food trucks se ha estancado un poco, pero ahora les piden unidades móviles para todo tipo de promociones y activaciones de marca que se puedan desplazar en festivales, eventos deportivos, ferias o estacionamientos."En 2014 éramos cuatro fabricantes grandes ubicados en el Estado de México, Monterrey, Guadalajara y San Luis Potosí y en 2016 con la desilusión de los emprendedores e inversionistas empezaron a vender sus camiones y ahora los encuentras en Mercado Libre o en sitios de segunda mano", explicó López. "Ahora seguimos los mismos cuatro fabricantes, pero no con el mismo nivel de trabajo. Antes hacíamos unos 100 food trucks al año y ahorita a lo mejor 10", añadió el gerente de Food Trucks.Sin embargo, la fabricación de vehículos para otro tipo de negocios sigue creciendo. "Hicimos un show room para Huawei en un tráiler multipropósito que se puede mover a otros lugares para exhibir los productos" Las cafeterías se siguen haciendo y ahorita nos están pidiendo triciclos adaptados", agregó López.Un food truck puede costar hasta 600.000 pesos (28.115 euros, al cambio actual), pues se recubre con acero inoxidable grado alimenticio y tiene piso antiderrapante, acabados de madera y su propio tanque de agua, luz y gas. Pero para otro tipo de negocios que no manejan alimentos la inversión puede ser menor, ya que no requieren cocina.Boxtrucks, fabricante de unidades móviles en Veracruz, tiene más de 40 años dedicados al equipamiento de vehículos y coincidió en que ahora la necesidad de los clientes es hacer negocios móviles para estar un día en una colonia, otro día en otra y poder desplazarse como los tianguis en cualquier lugar."Nosotros somos carroceros, no empezamos haciendo food trucks, estamos especializados en campers, cajas secas y refrigeradas, hacemos conversiones de camiones y camionetas. Y ahora la tendencia es que los negocios o franquicias con capacidad económica pueden tener diferentes puntos de venta y estar en lugares donde no están actualmente como festivales, eventos deportivos, eventos de música donde no solo venden comida sino tiendas de todo tipo de productos", comentó la arquitecta Paula Solís, encargada de diseñar las unidades móviles.Múltiples negociosRecientemente, Boxtrucks adaptó varios camiones para Yemina para vender pastas en zonas de oficinas, pero les han pedido desde salones de belleza, uñas, servicios, estéticas caninas, consultorios médicos para el gobierno, ópticas, tiendas de ropa y promociones para varias marcas. Boxtrucks fabrica alrededor de 10 vehículos al mes. "No son baratos porque utilizamos materiales de alta calidad. Es toda una especialidad", indicó Solís.Otra variante de los remolques son los cines. En Oaxaca, el fabricante de estructuras móviles Traylfer, fabrica unos 200 remolques al año, entre oficinas, estéticas, clínicas móviles, servicios para mascotas, escenarios para espectáculos y pequeñas salas de cine. A través de Cine Transformer la empresa ha fabricado 27 salas de cine móviles para México y tres en Brasil y otros tres en EEUU.El cine móvil es un vehículo que se transforma en sala de cine con 91 asientos, pantallas de proyección de 14", sonido surround de 5.1 canales digitales impulsados por equipos JBL, atmósfera climatizada y controlada, dos baños, dulcería con máquina de palomitas, taquilla expandible, rampas de entrada y salida de fácil acceso, marquesinas y costados brandeables y se transforma en menos de una hora.