La inseguridad y la excesiva burocracia restan imagen a Italiaroma. El crimen organizado y la percepción de que Italia no garantiza la seguridad en su territorio es una de las grandes barreras para las inversiones extranjeras. Eso es algo que tiene muy claro Mario Resca, presidente de McDonald's Italia y de la Cámara de Comercio Americana en Italia desde 2002 hasta la primavera de 2006. "Italia es poco competitiva por culpa de la burocracia, de la fiscalidad, de los altos costes de las infraestructuras y de las continuas noticias sobre la criminalidad, que contribuyen a hacer poco atractivo nuestro país", explica Resca.También sostiene que Italia no está haciendo lo suficiente para contrarrestar esa imagen de inseguridad. "No podemos permitirnos afirmaciones como las del presidente ruso, Vladimir Putin, según las cuales Italia es la cuna de la mafia".La competencia entre los Estados es dura y basta cualquier cosa para desviar la inversión de un país a otro. "Los americanos miran a Europa como a un único mercado y, cuando seleccionan el país donde quieren instalarse, la decisión suele recaer sobre el que mejor funciona. Gran Bretaña es liberal y garantiza seguridad. Francia y Alemania son economías importantes y seguras. España está en una época de fuerte crecimiento. Italia, en cambio, se queda atrás por su economía estancada, por su sistema burocratizado y sindicalizado, y por la difusión del crimen organizado".Poca competenciaSin embargo, la experiencia directa de Mario Resca no es del todo negativa. Fue él quien, en 1997, decidió abrir en Palermo el primer restaurante de la cadena de fast food."En aquella época vinieron a verme algunos directivos de EEUU para disuadirme, pero seguí adelante y nunca tuve problemas con el crimen organizado. Ahora tenemos 12 restaurantes en Sicilia y 110 en el sur del país, sin experiencias negativas en cuanto a la seguridad. Además, logramos beneficios, porque hay poca competencia", afirma.El problema es que el crimen organizado y la percepción que los extranjeros tienen de este problema en Italia sigue siendo una barrera que frena sus inversiones.