Llegó al Gobierno andaluz de rebote, pero en nueve meses se ha convertido en uno de los referentes del Ejecutivo de Juanma Moreno, tanto por su discurso moderado y pragmático como por haber sido capaz de elaborar en ese tiempo dos presupuestos para 2019 y 2020.¿Qué supone para Andalucía volver a elecciones por cuarta vez en un año? ¿Cómo va a influir? En Andalucía, nosotros buscamos sacar cuanto antes los Presupuestos para dar una imagen de seguridad, de credibilidad, de fiabilidad y de estabilidad de este nuevo Gobierno autonómico. Pero que no haya Gobierno de la Nación y que tengamos que ir otra vez a elecciones es justo la imagen contraria de lo que necesitamos: inseguridad, desconfianza, inestabilidad, falta de confianza de los mercados, falta de confianza de los empresarios y falta de confianza de los trabajadores, porque no saben qué va a pasar.¿Cómo valora la labor de su antecesora en el cargo como ministra?Siempre dije que yo jugaría con ventaja con respecto al resto de consejeros cuando nos sentemos a negociar la financiación autonómica, porque tenía una ministra que había sido consejera y desde aquí había defendido 4.000 millones más para Andalucía, y 16.000 millones más para el resto de España, y que yo le había escuchado una defensa potente del carácter autonómico. Nuestra sorpresa es que se ha producido en ella un cambio radical. Ya se ha olvidado de todo eso y, además, el Consejo de Política Fiscal y Financiera lleva más de un año sin convocarse.Parece que el cambio de modelo de financiación autonómica tampoco se va a producir en los próximos meses. El momento de abordar el cambio de modelo de financiación no es éste, con esta situación. Nosotros exigimos que esto sea prioritario para el Gobierno que salga de las urnas. Creemos que lo que nos une en un país no solo es una bandera, sino que tengamos los mismos servicios en Andalucía que en Cataluña, Galicia o Valencia y que no haya españoles de primera y de segunda.¿Cómo van a ser los Presupuestos de Andalucía para el próximo año? Van a seguir la priorización en materia de Sanidad, Educación, Dependencia, potenciar las infraestructuras y también profundizar en las rebajas fiscales… Hay que recordar que ya tenemos una segura, como es la del IRPF. Cuando la anunciamos tenía una proyección de cinco años y éste es el segundo. Y otra serie de figuras impositivas sobre las que estamos trabajando, pero no solo aquí, sino con otras consejerías. Nuestro objetivo es rebajar impuestos, porque cuando lo hemos hecho hemos visto que la economía de Andalucía está creciendo por encima de la media nacional. Una cuestión importante es la colaboración en ese déficit del Estado en su conjunto, y que aquí vamos a cumplir con el 0%. Va a ser un presupuesto de equilibrio presupuestario, cosa que nunca se ha hecho en Andalucía.¿El Presupuesto de 2020 será el de los grandes cambios políticos?Yo creo que en 2019 hubo ya unos cambios importantes, pues fueron los presupuestos más sociales de la historia de Andalucía, con la mayor inversión en educación y sanidad. Y ahora hemos introducido cambios enfocados a mejorar la eficiencia de nuestra gestión. En estos Presupuestos de 2020 hay un compromiso adquirido para hacer auditorías operativas, es decir, para conocer realmente cuál es el funcionamiento de los entes instrumentales de la Junta y así poder tomar mejores decisiones sobre cómo mejorar su eficacia y eficiencia. Lo haremos con consultoras externas, que nos vayan a ayudar a tomar decisiones importantes.El PP ha criticado durante años que el presupuesto de Andalucía era para pagar la enorme estructura administrativa de la Junta. ¿Qué hará ahora para corregirlo?Tenemos que tener una gran organización administrativa, porque con 8,5 millones de ciudadanos somos más grande que 13 países de la UE. Las críticas eran a la ineficacia e ineficiencia que pagábamos con aquella Junta de Andalucía. Por ejemplo, cuando hemos abonado 170 millones de una sentencia por el Metro de Sevilla, es como si cada familia andaluza hubiera tirado 100 euros. Estamos trabando en esto para que cosas así no se produzcan. Hay que ser eficaces y eficientes con los impuestos de la gente. Ese es el gran cambio que debe producirse.También es consejero de Industria, sector en el que Andalucía tiene un fuerte déficit. ¿En qué línea va a ir? En Industria tenemos un porcentaje bajo con respecto al ámbito nacional, pero también es cierto que contamos con empresas muy potentes en Andalucía. ¿Y cómo vamos a favorecer la industria? Pues mire, aquí nadie me ha llegado pidiendo dinero. Lo que nos han pedido es simplificación de trabas administrativas y burocráticas. Ahí es donde estamos. El gran objetivo para 2020 debe ser sentarnos a negociar entre todos para ver cuál va a ser la nueva estrategia en materia industrial para Andalucía 2021-2016.¿Cuál es la línea que quiere seguir la Junta en energías renovables?El gran reto para la próxima legislatura va a ser la planificación estratégica en cuanto a la evacuación de la energía. Eso lo acomete Red Eléctrica y depende del Consejo de Ministros. Nosotros hemos presentado una propuesta que es muy ambiciosa y por la que pedimos llegar a acaparar el 46 por ciento de la nueva oferta que haga el Gobierno. En Andalucía tenemos ofertas de inversión que superan los 17.000 millones en energías renovables. Hablamos de eólica, fotovoltaica o biomasa. Imagínese si somos capaces de darle respuesta a eso.