¿Están las Mama Chicho, Sálvame o Mujeres, Hombres y viceversa detrás del auge de los populismos en Europa? Un estudio publicado por la revista académica American Economic Review apunta a que en parte sí, ya que hay una relación directa entre el consumo de la llamada televisión basura, el nivel de educación y la predisposición a votar a los líderes populistas. En concreto, el estudio elaborado por los investigadores Rubén Durante, Andrea Tessei y Paolo Pinotti, analiza el impacto de la televisión de entretenimiento de Mediaset en el panorama político italiano y el triunfo del partido de Silvio Berlusconi (Forza Italia) y el auge del Movimiento Cinco Estrellas de Beppe Grillo en 2013. Entre las conclusiones que arroja la investigación, bautizada como The Political Legacy of Entertainment TV y replicada por The Was-hington Post, los autores destacan que las personas que más han visto los programas de entretenimiento de Mediaset, que en un primer estadio eran sobre todo de corte ligero, han votado más al partido de Silvio Berlusconi y han tenido un menor desarrollo intelectual y cívico y muestran un menor interés por la política, por integrarse en su comunidad o por desarrollar actividades de voluntariado. "Nuestros resultados sugieren que los individuos expuestos a la televisión de entretenimiento cuando eran niños son, en la edad adulta, cognitivamente menos sofisticados y están menos comprometidos a nivel sociopolítico, y en última instancia, son más vulnerables a la retórica populista de Berlusconi", señaló Rubén Durante, profesor de la UPF. En este punto, el estudio señala que las personas que vieron Mediset cuando eran pequeñas no sólo tenían una desventaja intelectual con respecto a los niños que no crecieron viendo la cadena privada italiana (los primeros "se desempeñan significativamente peor tanto en el cálculo numérico como en el alfabetismo"), si no que votaron casi ocho puntos porcentuales más por Berlusconi que estos otros. En cuanto a la población con menor nivel educativo (estudios secundarios), el estudio señala que aquellos que fueron expuestos a la televisión de entretenimiento votaron tres puntos porcentuales más por el partido Fuerza Italia que sus contrapartes no expuestas, es decir, que las personas con bajos estudios que vivían en municipios donde Mediaset llegó más trade. El efecto Mediaset ha tenido aún más incidencia en las personas que tenían más de 55 años cuando empezaron a ver los programas de entretenimiento de la cadena italiana. Según los datos recogidos por el estudio, del que la Universidad Pompeu Fabra hizo una reseña en 2017, este grupo votó a Forza Italia 10 puntos porcentuales más que los votantes que no veían esos contenidos en la misma edad. Y es que parece que esta población empezó viendo los programas ligeros en los años 80 y luego se engancharon a los contenidos informativos de la cadena, que se introdujeron en 1992, y que tradicionalmente están inclinados a favor de Berlusconi, que fue nombrado primer ministro en 1994. No en vano, el empresario y político fundó Mediaset y ahora su familia es la principal accionista. Así, las personas mayores expuestas durante la década de 1980, cuando se empezó a expandir el canal, eran un 16 por ciento más propensas a informarse a través de sus noticias. "Nuestros resultados sugieren que el contenido de entretenimiento puede influir en las actitudes políticas, y crear un terreno fértil para la propagación de mensajes populistas. Se trata del primer gran estudio para analizar el efecto político de la exposición entre los votantes a una emisiones de programas de entretenimiento ligero", señala Durante a la UPF, que no dudó en apuntar al auge de otros líderes populistas, como Donald Trump.