Emprendedores-Pymes

La CE quiere que las pymes europeas dependan menos de los créditos bancarios

    El comisario europeo de Servicios Financieros, Jonathan Hill.


    La Comisión Europea (CE) quiere que las pymes europeas dejen de ser tan dependientes de los créditos bancarios y busquen otras fórmulas de financiación en el mercado de capitales, más resilientes que los bancos ante la crisis, explicó hoy el comisario europeo de Servicios Financieros, Jonathan Hill.

    Para ello, la CE ha acordado hoy abrir un período de consultas de tres meses al que seguirá la puesta en marcha de medidas concretas con el horizonte de en 2019 crear una verdadera Unión de Mercados de Capital en la Unión Europea (UMC).

    "En Europa, las empresas y, especialmente, las pymes, dependen mucho de bancos y poco de los mercados de capitales. En otras zonas del mundo es todo lo contrario, y eso hace a esas economías menos vulnerables", explicó hoy en rueda de prensa el comisario Hill.

    Bruselas quiere, según contaron fuentes comunitarias, que de cara a 2019, "los bancos no financien más del 60% de las inversiones de la economía comunitaria y dejen al menos un 40% de la cuota a los mercados de capital".

    Según los datos de la CE, el 80% de las pymes en la UE se financian a través del sector bancario y solo el 20% en los mercados de capitales, mientras que en Estados Unidos, uno de los principales competidores de los europeos, es al revés.

    Necesitamos fuentes alternativas de financiación

    La CE considera que la UMC, mediante la diversificación de fuentes de financiación para la economía real y el fin de la fragmentación de los 28 mercados nacionales, será acicate para las pymes comunitarias e impulsar así la competitividad, el empleo y el crecimiento.

    "Se trata de movilizar el capital congelado para que trabaje por la economía europea", dijo Hill. "Las pymes lo están pasando mal, por eso necesitamos fuentes alternativas de financiación", añadió el comisario, que afirmó que si los niveles de capital riesgo en la UE fueran como los de EEUU las empresas europeas hubieran tenido acceso a 90.000 millones de euros durante los peores años de la crisis.

    El titular de Estabilidad Financiera, Servicios Financieros y Unión de Mercados de Capital quiso tranquilizar al sector bancario, "al que no se quiere sustituir ni arrebatar su papel clave para la economía".

    Igualmente, Hill reconoció que el proyecto de la UMC "es muy ambicioso" y que en cualquier caso "es un objetivo a largo plazo".

    En el periodo de consultas del sector, la CE también quiere mejorar el mercado de las titulaciones, un fenómeno que se ha extendido mucho en el ámbito del mercado hipotecario y que se refiere al procedimiento por el que un intermediario financiero transforma un activo no negociable.

    "Queremos que se desarrolle un mercado europeo de titulaciones de alta calidad, transparente, sencillo y normalizado. Conseguiremos que la banca tenga un balance más saneado y con más capacidad de prestar a la economía real", afirmó.