Análisis: Eres masivos y empresa familiar
Está claro que el cierre continuo de empresas familiares recibe poca cobertura mediática en comparación con los eres de las grandes empresas de nuestro país.
Este hecho no sorprende en España, en donde la imagen del gran empresario que se enriquece dejando a las masas con las manos vacías tiene gran calado, y vende bien.
Sin embargo, poner mayor atención y reflexión sobre cómo frenar la sangría de empresas familiares, que representan más del 70% del PIB de nuestro país, y más del 75% del empleo, es fundamental para poner freno a nuestro apabullante y creciente número de parados.
Los temas que hay que resolver
Teniendo en cuenta que gran parte de las empresas que cierran lo hacen por una gestión inadecuada de su flujo de caja, por no saber ajustar su tamaño y operativa a los tiempos que corren o por no contar con un posicionamiento de empresa distintivo, está claro que estos son los temas que hay que resolver de cuajo. Y en esta resolución es en la que debería implicarse nuestro Gobierno, replicando, quizás, el modelo alemán de introducir en todos los ayuntamientos equipos de expertos y técnicos que puedan dar apoyo, vía comunicación, consultoría práctica y tutela continua a las empresas que lo necesitan.
Otra medida pertinente sería comunicar de manera constante el valor de la pyme familiar, su afán de superación y su capacidad de reinventarse, para que estas empresas le sumen a sus infinitas horas de trabajo el conocimiento técnico, el ingenio y la esperanza que necesitan para sobrevivir y prosperar.
Y, por supuesto, es ineludible la necesidad de ajustar la legislación fiscal, para que las pequeñas empresas paguen únicamente el IVA de las facturas cobradas, y no se vean obligadas a adelantar, trimestralmente, el IVA por sus impagos, como si fueran culpables de no cobrar.
De este modo , veríamos a medio plazo cómo cambian el aspecto de los escaparates, la oferta de los menús de los restaurantes, la oferta online y offline de los productos más tradicionales. Y sentiremos que el espíritu emprendedor ha estado siempre presente en el bar de la esquina.
María Millán es consultora en estrategia.