Agresiones e insultos a políticos salpican la precampaña de las elecciones europeas en España

La desafección política y el hartazgo de los ciudadanos amenaza con sobrevolar toda la campaña electoral de los comicios europeos en España.

Aún en precampaña, son varios los incidentes que han sufrido los políticos españoles en mítines y actos públicos entre los que había algún ciudadano que llevó su enfado a una fase más agresiva.

La última en padecer una situación de tensión ha sido Elena Valenciano, cabeza de lista del PSOE en las elecciones europeas, durante una visita al barrio del Cabanyal en Valencia. Este barrio es clave por simbolizar la contestación ciudadana contra la alcaldesa, la 'popular' Rita Barberá, que ordenó un controvertido derribo que está paralizado por la justicia. 

En principio, se trata de una zona favorable a la ideología socialista. Sin embargo, varios ciudadanos increparon a Elena Valenciano porque ahora, con las elecciones a la vuelta de la esquina, fuera cuando se preocupase por los problemas de la zona.

'Huevazo' a Pons en Castellón

La candidata socialista al Parlamento Europeo se ha llevado la mejor parte en comparación con otros de sus compañeros. Hace una semana, el vicesecretario de Programas del PP y número dos por este partido en la lista europea, Esteban González Pons, recibió un 'huevazo' a la Convención Política del PPCV en Castellón.

Una veintena de manifestantes que protestaban frente al Teatro Raval de esta localidad lanzaron un huevo a Pons a su llegada al recinto, impactando contra en el dirigente.

Entre los manifestantes había extrabajadores de Radio Televisión Valenciana (RTVV) y un grupo de personas que mostraron su repulsa contra las prospecciones petrolíferas en las Columbretes, e insultaron a su paso a distintos dirigentes del PP.

Puñetazo a Pere Navarro

El pasado domingo, fue el secretario general del PSC, Pere Navarro, quien se las vio con una agresión: una mujer le propinó un puñetazo durante un acto en Terrassa.

Una mujer de unos 50 años se le acercó mientras participaba en un acto privado y le propinó un puñetazo en la cara al grito de "hijo de puta".

Navarro, que en ese momento iba sin escolta por estar en un acto familiar, pidió rápidamente a su entorno que se dejase ir a la señora que lo había agredido, que escapó rápidamente de la zona.

El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, mostró su solidaridad con Navarro, ya que él mismo ha sufrido con anterioridad una agresión ciudadana, y atribuyó lo sucedido al clima de "división" que ha creado la fiebre soberanista en Cataluña.