PP y PSOE apelan a los indecisos, la masa de votos a la que seduce Albert Rivera

Unos se presentan como garantes de la estabilidad frente a los experimentos, otros se ofrecen para llevar a cabo cambios profundos, sacudir alfombras y abrir ventanas, y luego está Ciudadanos, que dice ser el partido que sirve para un roto y un descosido.

Tras la suspensión de algunos actos electorales de ayer por el accidente aéreo de Sevilla, los partidos han regresado con toda intensidad a la rutina de la campaña, tratando de fijar sus mensajes en la ciudadanía y hablando cada vez más en sus actos electorales de esos codiciados votantes, los indecisos.

El imposible equilibrio de Rivera

A ellos especialmente parece dirigirse la oferta de Ciudadanos, cuyo líder Albert Rivera, ha llegado a definir este domingo a su partido como "el antídoto contra el inmovilismo y la inestabilidad".

Usted, votante indeciso, puede pensar que se trata de términos antagónicos, ya que, por ejemplo, Podemos critica al PP de lo primero -el inmovilismo- y el partido de Rajoy alerta de que lo segundo -la inestabilidad- es lo que provocaría Podemos.

Pues no, Albert Rivera ha dicho en Valencia, tras vaticinar que decidirá gobiernos tras el 24 de mayo, que Ciudadanos no puede defraudar "a quienes quieren un cambio profundo ni tampoco a quienes quieren estabilidad".

Dirigentes del resto de partidos políticos sin excepción han empezado a cuestionar eso de estar "a setas y a rolex" o, dicho en términos geométricos, a sugerir que si Podemos es el partido del círculo, Ciudadanos pretende su cuadratura.

El PP critica a Ciudadanos por su inexperiencia y otros por ser una especie de genérico de color naranja del PP. De estos últimos es Cayo Lara, coordinador federal de IU, quien esta mañana en Tarragona aseguraba que "el poder económico ha inventado a Ciudadanos para mantener el chiringuito".

En su opinión, los intereses del capital han inyectado al partido de Albert Rivera en el sistema "como las hormonas a los pollos", por lo que considera que quien quiera un cambio y dude a quien otorgar su confianza, no puede dársela a Ciudadanos.

También se ha dirigido a los indecisos de la izquierda Pedro Sánchez, que ha hecho hincapié en un mitin en Fuenlabrada en que "lo útil" para poner fin al mandato del PP en territorios como Madrid es votar al PSOE.

El PP se agarra a la gestión económica

Lo que ofrece el PP, por su parte, es una gestión económica que ha permitido dejar atrás lo más duro de la crisis y recuperar datos macroeconómicos positivos.

"Gobernar es muy difícil y gobernar un país que estuvo en su crisis más profunda es todavía mucho más difícil", ha dicho María Dolores de Cospedal en una entrevista con Efe.

La secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha ha dicho desconfiar "de éstos que vienen ahora y dicen que tienen la varita mágica" para resolverlo todo.

También los indecisos han sido protagonistas de unas declaraciones de Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid y candidato del PP a la reelección, quien ha pedido a quienes dudan y no dicen en las encuestas que van a votar al PP, "por vergüenza o por pudor", que finalmente lo hagan "aunque sea tapándose la nariz".

En fin, que al pobre indeciso le van a seguir mareando cada vez más a medida que se acerque la hora de votar y aumente la tensión entre los candidatos.

Violencia en la campaña catalana

Para tensión, en Cataluña -y eso que solo hay municipales- porque allí se ha caldeado el ambiente después de la agresión a un candidato de CiU, a una de ICV y del "escrache" al alcalde de Barcelona, Xavier Trias.

Sin establecer una relación directa entre estos hechos y la campaña de la favorita en las encuestas para ser próxima alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, lo cierto es que CiU y el PPC han lamentado el tono del mitin conjunto del sábado de Colau y el líder de Podemos, Pablo Iglesias.

Este último tildó de "gentuza" y "ladrones" al presidente de la Generalitat, Artur Mas, y al expresidente Jordi Pujol, mientras Colau pedía votar para "echar a la mafia" de la ciudad.

Esto es "insultar, crispar y generar odio", ha dicho el actual alcalde de Barcelona y candidato de CiU a la reelección, Xavier Trias.

"Odio social", eso es también lo que el candidato del PP a la alcaldía de Barcelona, Alberto Fernández, cree que generan Colau e Iglesias con ese tono y esas palabras.

Fernández ha pedido que se destierre cualquier atisbo de violencia pero, de paso, ha recordado a los dirigentes de CiU que ponen el grito en el cielo por la agresión a su candidato, que no protestaban tanto cuando era a los del PP a los que se acosaba.