Concluye la campaña electoral, pero las incógnitas siguen abiertas
AFP
La campaña para las elecciones generales del 20D acaba este viernes, tras un maratón de Mariano Rajoy para intentar frenar el auge de los partidos emergentes, que podría costarle la reelección como presidente del Gobierno, aunque parte en cabeza. Especial 20D. EN DIRECTO | La campaña del 20D.
"El Partido Popular lo que tiene que hacer es ganar las elecciones", afirmó Rajoy, que se presenta como garante de estabilidad económica y política, a RNE en su última entrevista antes de los comicios del domingo. Los terrenos más favorables y desfavorables para los grandes partidos el 20D.
Los sondeos vaticinan que su partido será el más votado, pero sin llegar al 30% de los votos y con unos 120 diputados en un Parlamento de 350, lejos de la comodísima mayoría absoluta (186) de que disfrutaba desde finales de 2011.
Los demás deberían repartirse principalmente entre el PSOE y las dos formaciones emergentes, Ciudadanos y Podemos, que pisan los talones de los socialistas y amenazan incluso con superarlos.
Con un alto porcentaje de indecisos, todo parece posible en estas elecciones, según señala José Pablo Ferrándiz, responsable del instituto de sondeos Metroscopia. Para los comicios de 2011 "ya se sabía un año antes lo que iba a pasar y ahora uno de cada cuatro electores aún no está decidido, a dos días de las elecciones", subraya.
"En el tramo final de campaña pueden remontar todos", coincidía Rajoy, manteniendo su inquebrantable flema pese al agotamiento de dos semanas en la carretera, recorriendo los cuatro rincones del país para llegar a 34,5 millones de electores.
Tras una legislatura marcada por impopulares políticas de austeridad, el mandatario basó su campaña en la recuperación económica: el Gobierno prevé un crecimiento de 3,3% del PIB este año.
España conserva, sin embargo, un muy elevado desempleo (el 21,18% de media y el 46,6% entre los menores de 25 años) y una creciente desigualdad entre ricos y pobres.
Momento "histórico"
"Estamos viviendo algo histórico y estoy convencido de que el próximo domingo va a ser un día que vamos a recordar con el tiempo", lanzó Iglesias en un acto electoral este viernes en Murcia, adonde viajó para responder las preguntas de los ciudadanos.
Esta proximidad con los electores caracterizó la campaña, que debía terminar al filo de la medianoche con mítines en Madrid y Valencia, tras llevar a los candidatos a innumerables platós de televisión y sacar a Rajoy a las calles contra su costumbre.
Fue durante uno de estos paseos electorales, en la ciudad gallega de Pontevedra, cuando recibió el pasado miércoles un fuerte puñetazo en la cara por un muchacho de 17 años que fue detenido inmediatamente. El jefe del Gobierno decidió quitarle hierro al asunto y pidió que nadie sacase provecho político de esta agresión.
Pero lo cierto es que la campaña vivió otros momentos de gran tensión, como el debate televisivo especialmente bronco entre Rajoy y el líder socialista Pedro Sánchez, cuyos ataques, excesivos para algunos, pueden volverse contra él y costarle el liderazgo de la izquierda en favor de Podemos.
"Es probable que Podemos le pueda ganar al PSOE en número de votos", considera Ferrándiz, señalando que "Pablo Iglesias ha tenido una imagen mejorada".
Está también por ver qué soluciones se pueden encontrar tras las elecciones para formar gobierno; si el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, acepta favorecer, aunque sea con su abstención, a los populares. También, el impacto de un ejecutivo más o menos inestable en la recuperación.
"Un gobierno de coalición entre PP y Ciudadanos es nuestro escenario básico y debería ser favorable al mercado y a los negocios", afirmaba el economista Thomas Strobel en una nota de UniCredit. Sin embargo, "un periodo de inestabilidad política podría ciertamente quitar algo de fuerza a la mejora" económica, matizaba Jonathan Loynes, analista de Capital Economics.