Editoriales

Editorial: Los fallidos, la otra cara de la economía



    Es indudable que la economía comienza a ofrecer datos esperanzadores, pero en paralelo cohabitan signos que generan desasosiego, como los créditos fallidos. Hasta finales de 2012 sumaban 64.670 millones, un 12,6 por ciento más que el ejercicio precedente y prácticamente el doble que en 2009.

    Un boquete en la línea de flotación de la banca, que ha sido provisionado y sacado fuera de balance. Un problema menos ya digerido, que sin embargo puede seguir teniendo continuidad a tenor del crecimiento de la mora en junio (11,61%) y de los créditos de dudoso cobro (176.420 millones). La banca debe mostrarse menos reacia a conceder créditos, porque de lo contrario podría ser obligada, tal y como ayer avanzó el Parlamento Europeo.