Editorial: Microsoft saca partido a sus pérdidas
La ingeniería fiscal con la que juegan las multinacionales crea un agravio comparativo con las empresas locales. Se producen casos como el de la filial española de Microsoft, que dirige María Garaña, que perdió el año pasado 100 millones y ha conseguido amortiguar a través de la devolución fiscal el 28% de sus pérdidas. Paralelamente, Hacienda le reclama 12 millones por el Impuesto de Sociedades y el IRPF de los no residentes de los años 2004, 2005 y 2006, mientras investiga la estructura societaria que le permite tributar parte de sus beneficios en Irlanda. Llama la atención del fisco este esquema de pérdidas en España y beneficios en Irlanda. Microsoft Ibérica acumula demasiados contenciosos, señal de que algo falla en su gestión.