Editoriales
Editorial: Más dinero para proveedores
Erradicar la deuda de las Administraciones Públicas con pymes y autónomos es una carrera de obstáculos para Hacienda. Con el Plan de Pago a Proveedores, que se puso en macha la primavera pasada con carácter improrrogable, se pretendía zanjar esta situación, causa del cierre de muchas empresas. El plan inyectó liquidez y las CCAA y ayuntamientos pudieron saldar sus deudas por 27.000 millones hasta 2011. Sin embargo, entre enero y septiembre se han acumulado facturas en el cajón por 10.000 millones más, hasta el punto de que algunas autonomías, además de usar el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) para afrontar vencimientos de deuda, han empezado a pagar también facturas.
El nuevo año empezará con una deuda pendiente por este concepto de 5.000 millones, que es la cantidad con la que Hacienda ha ampliado la dotación del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) para 2013, hasta totalizar 23.000 millones. El problema de la morosidad sigue siendo grave y se convierte en objetivo prioritario del FLA. Un parche que ayuda, pero que no tapa el problema de fondo: el sistema de financiación autonómica se ha encasquillado porque el sistema tributario está agotado.
Las CCAA están volcando todo el esfuerzo del ajuste en el gasto, pero no es suficiente, y enfrentan problemas de liquidez que las superan. Demorar el gasto a 2013 enmascara el problema pero no lo soluciona, más cuando ese año habrá que recortar otros 7.000 millones para reducir el déficit autonómico al 0,7% del PIB. La solución es que Montoro aborde sin dilación la reforma de la financiación autonómica en el contexto de un nuevo modelo fiscal y de unas administraciones que eliminen la duplicidad de funciones y servicios.