Editoriales
Editorial: ... y sin piedad para los 'zombis'
Las entidades financieras intervenidas por el FROB en 2011 -Banco de Valencia, CatalunyaCaixa, Novagalicia, CAM y Unnim- registraron unas pérdidas antes de impuestos de 7.142 millones de euros, cantidad que baja a 5.000 millones después de impuestos. Si se les suman los números rojos de Bankia -3.000 millones- superarían los 10.000 millones. Las cifras ponen de manifiesto la delicada situación que atraviesan estas entidades, que puede concluir en el cierre de algunas de ellas cuando se ejecute el rescate financiero. La idea de Bruselas es que hay que llevar a cabo una voladura controlada de los bancos zombis -aquéllos que surgieron de la fusión de entidades relativamente saneadas con otras que tenían graves problemas y acabaron lastrando a las primeras- y ya se contempla la posibilidad de liquidarlos.
Tiene razón Almunia al asegurar que es preferible la liquidación de un banco, si los costes de reflotarlo son demasiado altos para los contribuyentes. Por eso las condiciones que se impondrán van a ser muy duras. Las entidades sistémicas -recursos superiores a 150.000 millones- se salvarán de la liquidación, pero se les exigirán unos requisitos muy estrictos. La Comisión Europea sabe que la crisis está a las puertas del núcleo duro del euro, ya han saltado todas las alarmas y el bono alemán -el refugio al que todos acudían sin pedir nada a cambio- empieza a verse obligado a subir su interés. En estas condiciones no debe haber piedad, se imponen medidas efectivas.