Salvo milagro de Nochevieja, el Ibex 35, que pierde un 15,4% en 2018, cerrará su peor curso bursátil desde 2010, y comenzará 2019 pendiente de que Wall Street aguante sobre los mínimos del año para no destapar un margen de caída del 10% hasta el suelo de 2016, los 7.579 puntos.
Los inversores están cerca de volverse insensibles. "El mercado hoy es como estar viendo una película de Tarantino: a la mitad la violencia deja de molestar", bromean algunos analistas en declaraciones recogidas por Bloomberg. La volatilidad, hiperbolizada por los gestores automatizados, ha sido extrema en las últimas sesiones. Sobre todo, en Wall Street, donde los índices registraron el lunes pasado nuevos mínimos del año tras sufrir la peor sesión de Nochebuena de la historia, para inmediatamente después escenificar un rebote por despecho en forma de montaña rusa, con verticales y heroicas remontadas de apenas horas. Un reversal que, de momento, solo es eso, pero que, al menos, sirve para afianzar los suelos del ejercicio de las principales referencias como niveles del pánico –en las zonas de los 2.350 puntos del S&P 500 o de los 5.895 enteros del Nasdaq 100–, de los que depende que el Ibex 35 profundice o no en las pérdidas, hasta los mínimos de la sesión posterior al Brexit, la del 24 de junio de 2016, cuando llegó a tocar los 7.579 puntos, hasta donde tiene un margen de caída del 10%.
De momento, y salvo milagro de Nochevieja, el selectivo español cerrará este lunes su peor curso bursátil desde 2010, al caer a falta de esta última sesión más de un 15% desde el primero de enero. Un balance para el que solo hay excepciones, como Brasil, en el conjunto del globo. Para el resto, la misma conclusión: un año para olvidar, con un S&P 500 cediendo un 7% o el EuroStoxx 50 un 15%.
En la sesión del viernes, el Ibex rebotó casi un 1,5%, abriendo la oportunidad de deshacer posiciones a quienes hayan llegado a este punto con exposiciones inasumibles, en un contexto en el que es tarea imposible calibrar la ecuación rentabilidad-riesgo. "Mientras los principales índices norteamericanos no pierdan los mínimos de Nochebuena consideramos que son muy altas las probabilidades de que las bolsas europeas estén sentando a corto plazo las bases de un rebote que podría ser importante, sin perjuicio de que lo consideraremos vulnerable y previo a una continuidad de la corrección bajista de los últimos meses", explica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, quien detalla que "las bolsas se debaten a corto entre desarrollar una corrección bajista vertical, que se abriría si Wall Street pierde el suelo de 2018, o una corrección en tendencia a fuego lento –ver página 16–".
La dramática sesión de Nochebuena dejó al S&P 500 a las puertas de un mercado bajista, al prolongar las pérdidas desde su último máximo histórico, el registrado el 20 de septiembre sobre los 2.930 puntos, hasta casi el 20%, el límite para que técnicamente se considere que un índice ha entrado en territorio de osos. Este contexto puede parecer contradictorio con una economía de EEUU que crece por encima del 3% y que rebajará el ritmo sí pero que lo mantendrá por encima del 2%, con unos beneficios empresariales que también se incrementan si no a doble dígito al menos a uno medio-alto y con una política monetaria que ha virado de restrictiva a neutral.
Pero lo cierto es que solo la mitad de los 14 mercados bajistas que ha sufrido el S&P 500 desde la Segunda Guerra Mundial han coincidido con una recesión, según un estudio de LPL Research. Cuando no lo han hecho, como se puede presumir que está ocurriendo ahora, las caídas del selectivo de referencia de la bolsa de Nueva York han profundizado un 24% de media, mientras que cuando sí han precedido o coexistido con una contracción de la actividad económica, las pérdidas se han ido hasta el 37%.
"El riesgo de recesión global es reducido", explica el equipo de analistas de Bankinter, que, eso sí, aconseja "ser prudentes mientras no se resuelvan los acontecimientos más importantes, porque la volatilidad irá en aumento a medida que avancen las negociaciones comerciales –ver El Perfil del Mercado–, nos acerquemos al día D para el Brexit (marzo 2019) y se celebren las elecciones al Parlamento Europeo (mayo 2019)". Otro de los riesgos latentes es la falta de liquidez, de la que viene avisando la famosa curva de los tipos de interés de EEUU.