Cuando los británicos eligieron -cuando nadie lo esperaba- salir de la Unión Europea el 23 de junio de 2016, condenaron al Ibex 35 a vivir la peor jornada de su historia al día siguiente, cuando sufrió un retroceso del 12,35%. Y el español cayó más que el resto de índices de la región simple y llanamente porque su exposición al país es sustancialmente superior.
De acuerdo con los datos de FactSet, el 7,1% de la facturación del selectivo procede de las islas, un 50% más que el 4,8% del EuroStoxx, el 4,9% del Dax o el 4,1% del Cac.