El próximo martes, los 435 escaños de la Cámara de Representantes y 35 de los 100 bancos del Senado se someterán al escrutinio de los estadounidenses. Unas legislativas atípicas dado el enrarecido, a la par que tenso, clima político que vive el país y que algunos perfilan como un referéndum sobre la gestión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Entre las principales mesas de inversión, el escenario base, con más de un 65% de probabilidades de materializarse, contempla un Capitolio dividido donde los demócratas contarán con una hegemonía en el Congreso, si logran sumar 23 escaños más a los actuales, pero los republicanos mantendrán una mayoría simple en la Cámara Alta.