Que el principal selectivo de renta variable en España, el Ibex 35, no atraviesa su mejor momento del año salta a la vista de propios y extraños en el mercado bursátil.
Tras casi dos semanas completas de números rojos, el índice español se presenta como uno de los selectivos que mayor debilidad ha demostrado en Europa en las últimas fechas.
Y lo peor es que todo hace indicar que la tendencia no tiene visos de cambiar a pesar de que se hayan perforado recientemente los mínimos de los últimos 20 meses.
La crisis que atraviesan los países emergentes ante la fortaleza del dólar estadounidense, siguen lastrando a un selectivo que tiene mucha exposición a estas economías.
El último ejemplo que escenifica esta alta exposición a dichas naciones la dio ayer BBVA, que anunció que los beneficios que se anotará por el mercado otomano se verán más mermados de lo pensado inicialmente como consecuencia de la depreciación de la lira turca.
Y no es la única. Telefónica, otra de las firmas que más pesan en el selectivo español también se ha mostrado afectada por las crisis en Latinoamérica, tanto la brasileña como la argentina. Y así se podría seguir con un buen puñado de firmas del Ibex.
En este contexto y ante el temor a que la escalada comercial entre EEUU y China -la ansiedad generada por la tensión comercial ante la posible implementación de aranceles contra el gigante oriental por valor de 200.000 millones de dólares es manifiesta- los bajistas siguen sin dar ningún signo de agotamiento vendedor que sugiera la posibilidad de asistir a un contraataque alcista que ayude a los índices a recuperar los soportes perdidos en la jornada del miércoles
De hecho, el EuroStoxx 50 en su versión Total Return, perdió ayer también su zona de soporte, algo que es de todo, menos un signo de esperanza para los alcistas.
"Mucho nos tememos que las caídas van a proseguir hacia los grandes soportes europeos, tales como son los 3.180-3.200 del EuroStoxx 50 y los 11.600 del Dax 30 alemán", asegura Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader.
En este contexto, el selectivo español ha abierto la puerta a "una continuidad de la fase correctiva que nació en mayo de 2017 desde el entorno de los 11.200 puntos y que podría profundizar hacia la zona de los 8.800-9.000 puntos", explica Cabrero.
Por eso, desde Ecotrader se ha decidido seguir reduciendo el peso de la renta variable en la cartera modelo. Esta vez se ha hecho a través del cierre de las operativas en Meliá, Técnicas Reunidas y ASML Holdings. Con estos cierres, el la exposición a bolsa de la cartera se ve reducida hasta los 60 puntos porcentuales.
Además, también se ha procedido a sacar de la cartera de estrategias agresivas a Facebook, tras perder el stop que teníamos fijado en ella