La preocupación por la imagen que proyectamos se ha disparado en los últimos años. Muestra de ellos es la cantidad de negocios relacionados con el cuidado personal que han florecido más allá de la tradicional peluquería. Estilistas, cuidados de uñas, centros de bronceado, tratamientos para luchar contra el envejecimiento...
Precisamente, esto último ha sido uno de los grandes motores del sector de la cosmética: el aumento de la esperanza de vida. "El rápido envejecimiento de la población ha llevado a una fuerte demanda de productos para prevenir el paso de tiempo, impulsando así el crecimiento de la industria", indican desde la consultora Orbis Research. De hecho, según los datos de Statista, el cuidado de la piel ha sido y será la línea de negocio más rentable del sector, con una cuota de mercado superior al 35%.